El consejero delegado de los Centros Turísticos, José Juan Lorenzo, ha acusado al Comité de Empresa de sustentar el preaviso de huelga a partir del día 15 de agosto en "varias falsedades" y ha pedido a los trabajadores, a CCOO y a UGT, a la sociedad, a los empresarios turísticos, a los medios de comunicación y a los partidos políticos que insten a Intersindical Canaria, "único sindicato que firma esta convocatoria", a que desconvoque de forma "urgente" este preaviso de huelga.
Lorenzo ha comparecido en una rueda de prensa junto al consejero Luis Arráez, que ha calificado este preaviso de "algo gravísimo, que pone en jaque a toda la isla de Lanzarote". "De no darse marcha atrás, hoy mejor que mañana, será un problema muy grave. Parece una broma de mal gusto, porque no es que no estén cobrando o que se haya presentado un ERE, es que es un auténtico disparate e inesperado, porque no existe un solo motivo para esta convocatoria", ha insistido Arráez, que considera que la dirección de la empresa "quizá ha sido demasiado generosa".
En este sentido, ambos han señalado que el Comité de Empresa no quiere que se elimine "ninguna" cláusula del convenio colectivo, "ni siquiera la de qué hacer en caso de les llamen para el Servicio Militar Obligatorio", ha apuntado Lorenzo. Así, ha señalado que la empresa propuso una rebaja salarial del 10 por ciento, pero "se redujo hasta el 4,6 por ciento y se introduce un variable si hay beneficios".
También planteó incluir un factor de sostenibilidad para que las nuevas incorporaciones que suplirán a los jubilados estuvieran sujetas a otro convenio "con costes ajustados". Asimismo, se propuso trabajar 40 horas, "dos horas y media más". Sin embargo, según Lorenzo, "el planteamiento del Comité de Empresa es no tocar ni una coma de ese convenio".
Lorenzo ha señalado que la empresa no ha roto las negociaciones, sino que el pasado día 26 se acordó prorrogar las mismas y el convenio colectivo actual hasta el 7 de octubre, después de que en las últimas reuniones con el Comité de Empresa no fuera posible alcanzar un acuerdo, según el consejero delegado.
Ante este hecho, Lorenzo ha querido dejar claro que desde el Comité de Empresa se trasladó "falsedades a los trabajadores", puesto que la dirección "en ningún momento" rompió las negociaciones. El consejero delegado sostiene que los 84 trabajadores que acudieron a la Asamblea votaron "autorizar al Comité de Empresa a que se reuniera con la dirección y ejerciera una presión, o negociar o preaviso de huelga". Sin embargo, según su versión, el Comité de Empresa "no lo cumplió, porque presentó el preaviso directamente". "Fue con falsedades con las que los trabajadores tomaron esta decisión", ha insistido.
Los trabajadores "dudan de quién les miente"
El consejero delegado decidió reunirse con los trabajadores, que le trasladaron su "desconocimiento" ante esta medida. "Dudan sobre quién les está mintiendo, nos piden careos", ha asegurado, al tiempo que ha añadido que no quiere "suplantar al Comité de Empresa, que debería liderar esta comunicación".
Lorenzo también ha querido hacer hincapié en que el preaviso de huelga "sólo lo firma Intersindical Canaria", el sindicato mayoritario en los Centros, y no lo firman ni CCOO ni UGT. En el escrito, aparecen sus nombres, pero no vienen sus firmas. Por ello, ha pedido a estos dos sindicatos que se pronuncien públicamente, aunque ha señalado que "verbalmente han dicho que no la apoyan e, incluso, piden la nulidad judicialmente".
Encierro "planificado"
Sobre el último encierro que protagonizó el Comité de Empresa en la sede de la calle Triana, en Arrecife, Lorenzo ha asegurado que "estaba planificado con independencia de los planteamientos de la dirección". "Se trasladó al los trabajadores que no queríamos entregar el acta. Lo que nos negamos era a poner que habíamos suspendido las negociaciones, porque no era verdad, se prorrogaban hasta el 7 de octubre", ha defendido. "Su voluntad era levantarse y romper la negociación. Por eso se montó este cristo por el acta", ha asegurado.
Lorenzo ha insistido en que "el preaviso ya está dañando la imagen turística de Lanzarote". "Vamos a beneficiar al resto de competidores, con una medida innecesaria, porque seguimos estando en la mesa de negociación". Por su parte, Arráez ha considerado que la medida planteada por el Comité de Empresa "es descabellada y una sin razón". "Lo se debe jugar ni a presiones, ni a chantajes con este asunto. Es un chantaje, un pulso una amenaza para toda la isla. No lo podemos permitir", ha manifestado.