Con el deseo de acabar el año con un triunfo que les acerque a los puestos altos de la clasificación afronta la UD. Lanzarote el partido del domingo ante el filial del Atlético de Madrid, un equipo que reboza juventud y talento en todas sus filas, pero que no está acabando de encadenar las dos o tres victorias consecutivas que le catapulten a los puestos altos de la tabla, lugar natural de este equipo durante las últimas campañas.
Por su parte la UD. Lanzarote, con los ánimos renovados tras su convincente triunfo del pasado domingo ante el CD. Leganés, es consciente de la importancia de los puntos en juego para definir las verdaderas opciones de los rojillos esta temporada. De esta forma, un triunfo en tierras madrileñas permitiría a la UD. Lanzarote afrontar la segunda mitad de la competición con sus opciones intactas para luchar por todo este año.
El Atlético B pondrá a prueba a la UD. Lanzarote. Foto: Rayo Vallecano
Los precedentes en el Cerro del Espino invitan al optimismo, porque en sus últimas tres visitas al estadio rojiblanco el Lanzarote ha obtenido una victoria (1-2 en la temporada 2002-03), un empate (0-0 en la 2003-04) y la derrota cosechada el pasado año por 2-0. Además el Atlético B no está cuajando buenas actuaciones este año en su estadio, dónde no gana desde el pasado 23 de octubre cuando se impuso al Castillo. Tres triunfos, tres empates y dos derrotas es el discreto bagaje de los rojiblancos en casa.
Para el choque contra los colchoneros Adolfo Pérez, que volverá a sentarse en el banquillo tras cumplir su partido de sanción, contará con la única ausencia de Lanza, porque tanto Marino como Carreño parece que podrán estar disponibles para el domingo, una vez que se encuentran prácticamente recuperados de sus lesiones.
En lo que respecta al Atlético de Madrid, el técnico José Murcia tendrá la baja del goleador Iñigo, aunque recupera tras su sanción a Rubén Cuesta.