Canarias

Valbuena acusa a Clavijo y a Zapata de "responder a los intereses de las eléctricas"

El exconsejero canario de Transición Ecológica en la anterior legislatura les acusa de "dejar caducar" expedientes sancionadores por los apagones

EFE

El exconsejero de Transición Ecológica y actual senador José Antonio Valbuena (PSOE) en una imagen de archivo.

El exconsejero canario de Transición Ecológica en la anterior legislatura, José Antonio Valbuena (PSOE), ha acusado a su sucesor en el cargo, Mariano Hernández Zapata (PP), y al presidente de Canarias, Fernando Clavijo (CC), de responder a los intereses de las grandes compañías eléctricas, por "dejar caducar" expedientes sancionadores por los apagones.

"Cuando llegamos al Gobierno (en 2019), lo normal era que Clavijo dejara caducar los expedientes, nos encontramos con casi sesenta millones de euros en sanciones que habían prescrito porque no se había hecho absolutamente nada", ha denunciado Valbuena en declaraciones remitidas a los medios.

Durante el gobierno del pacto de las flores, "con los mismos medios, con los mismos recursos, con la misma ley de procedimientos administrativos, no dejamos caducar ni un solo expediente", ha asegurado el exconsejero.

Pero ahora "volvemos a las andadas" y su sucesor, Mariano Hernández Zapata, "empieza otra vez a lanzar barro contra la pared, a no asumir las propias responsabilidades" y a no hacer "absolutamente nada en la Consejería".

Según Valbuena, con Hernández Zapata "los expedientes caducan" de nuevo, no solo en el caso de las sanciones a las compañías eléctricas, sino también en el expediente que se abrió por la construcción del complejo turístico Cuna del Alma.

"Clavijo y Zapata responden a los intereses que tienen que responder, que son de las grandes eléctricas y los de las grandes empresas", ha sentenciado Valbuena.

El exconsejero se ha pronunciado después de que el actual Gobierno de Canarias informara el miércoles de la caducidad de expedientes sancionadores a las compañías eléctricas por sanciones por apagones que alcanzan casi 50 millones de euros, de lo que culpa al anterior ejecutivo.