El juicio por el desembarco de 600 kilos de hachís en Playa Quemada en 2014 debía arrancar este jueves, pero finalmente se ha suspendido. La Audiencia Provincial de Las Palmas ha adoptado esta decisión a petición de uno de los acusados, que sostenía que en el escrito de calificación se le imputan unos antecedentes penales que no tiene. Así, se ha decidido aplazar la vista hasta que se aclare esta cuestión, cuando se fijará una nueva fecha.
En la causa están acusadas seis personas por un delito contra la salud pública. La Fiscalía pide seis años de prisión para cuatro de ellos y seis años y nueve meses para los otros dos, a los que suma el agravante de reincidencia, señalando que ya habían sido condenados anteriormente por tráfico de drogas. Uno de ellos es el que niega esos antecedentes y ha provocado la suspensión del juicio.
El Ministerio Fiscal pide también que se les condene a pagar una multa de 2.978.601 euros cada uno, así como que sean decomisados todos los objetos que fueron intervenidos en la operación, entre los que se encuentra una embarcación Tipo Valiant, un vehículo y un teléfono satelital.
Los hechos ocurrieron sobre las 23 horas del 25 de octubre de 2014, cuando D.G.M. e I.G.M. llegaron a la isla en barco con la droga. En total, se incautaron 21 fardos con un peso total de 633,61 kilogramos, que según la Fiscalía “hubieran alcanzado en el mercado ilícito un valor de 992.867 euros”.
En Playa Quemada les esperaban otros dos acusados, P.M.M. y J.J.C.C., que llevaron a cabo las labores de porteo de los fardos de hachís, así como el acusado S.E.I., a bordo del vehículo que iban a utilizar para el transporte. Según informó entonces la Guardia Civil, estos tres últimos fueron detenidos en la playa, mientras que los ocupantes de la embarcación fueron arrestados ya en el puerto Marina Rubicón, a donde se dirigieron tras descargar la droga.
El sexto acusado, M.A.C.A., se encontraba en otro coche realizando “labores de contravigilancia por la carretera de acceso a Playa Quemada”.