Tribunales

El acusado de intentar matar a su compañero de piso: "No sé si es cierto porque estaba muy bebido"

El joven ha asegurado en el juicio que aquel día consumió "alcohol" y "pastillas" y que no recuerda "nada" de lo que sucedió

El acusado de intentar matar a su compañero de piso, durante el juicio

"No puedo decir si es cierto porque estaba muy bebido". Así ha arrancado su declaración el acusado de intentar matar a su compañero de piso en Arrecife, que ha sido juzgado este lunes por la Sección Sexta de la Audiencia Provincial. Y es que, ha asegurado no recordar nada" de lo que sucedió, salvo que "había consumido alcohol" y "pastillas". "No recuerdo nada más", ha insistido en sus respuestas ante las diferentes preguntas del Ministerio Fiscal. 

Según el relato del joven, de nacionalidad extranjera, él solo llevaba "unos cinco días" viviendo en la vivienda de Altavista donde tuvieron lugar los hechos y "no tenía problemas" con sus compañeros de piso. Sin embargo, ha afirmado que aquel día empezó a consumir alcohol "a las 4 de la tarde", que combinó "con trankimazin". "Luego no recuerdo nada", ha asegurado, después de que la fiscal le preguntara si ya de madrugada discutió con su compañero de piso, si le siguió por el portal de la vivienda y si le clavó un cuchillo en repetidas ocasiones en distintas partes del cuerpo. 

El acusado, que lleva en prisión provisional un año y cuatro meses, ha señalado que desde entonces ha estado tratando de recordar lo que le han "contado" sin haberlo conseguido. "Antes había sido operado de la cabeza y cree que igual eso le ha afectado", ha traducido la intérprete que le ha acompañado en su declaración. "Tampoco me lo puedo imaginar porque a mis 32 años de vida nunca había acuchillado a nadie", ha añadido el acusado.

Lo único que I.A. ha afirmado recordar es que al día siguiente de los hechos, que tuvieron lugar en la madrugada del 6 de diciembre de 2019, se despertó en el puerto de Arrecife y que le "dolía mucho la cabeza". Entonces, ha apuntado que llamó a otro compañero de piso "para ver qué había pasado" y que éste le dijo que "su número de teléfono estaba en manos de la Policía" y que "no regresara a la casa", pero que no le contó "nada" de lo ocurrido.

Posteriormente, ha afirmado que se quedó "sin batería" en el teléfono, que estuvo "hasta el día siguiente" en el muelle de Arrecife y que después se fue "a Playa Blanca". "Nunca he tenido intención de provocarle la muerte", ha señalado en su última palabra en el juicio, en la que ha pedido a la sala que vean lo ocurrido "con una visión amplia". 

 

"Hijo de puta, te voy a matar"

Por su parte, la víctima ha relatado que todo empezó con una discusión, después de que el acusado le pidiera "un cigarro" y él no se lo diera. Según ha expuesto, en ese momento ambos estaban en el salón de la vivienda "bebiendo" junto con otro compañero de piso y el procesado empezó proferir "insultos" contra él. 

Tras ello, ha afirmado que abandonó la casa para irse "a la calle a fumar" y que I.A. fue "detrás de él" y le dio "con el cuchillo" en el cuello. "Luego me dio más puñaladas, no solo una", ha apuntado, detallando que también le hirió en la espalda, en el brazo y en el costado. 

"Hijo de puta, te voy a matar", ha asegurado que le decía el acusado, al que ha apuntado que intentó "quitarle el cuchillo", sufriendo por ello también una herida en una mano. Asimismo, ha señalado que cogió "una sartén" que había en el portal de la vivienda y que se la tiró, aunque no sabe si le dio. 

Después, según ha indicado, el acusado dejó el cuchillo "en la calle" y "se fue corriendo" y él consiguió subir hasta la puerta de la vivienda para pedir auxilio al resto de sus compañeros de piso, que estaban durmiendo. Sin embargo, estos no han declarado en el juicio, ya que se encuentran en paradero desconocido. 

No obstante, sí que se ha leído la declaración que dos de ellos hicieron durante la instrucción del caso. En las mismas, afirmaron que ellos "no" presenciaron la agresión, pero que sí escucharon la discusión entre ambos y que "media hora después" el agredido llamó a la puerta de la vivienda y que estaba "sangrando". 

Quienes sí han declarado en la vista oral han sido los policías que intervinieron aquella noche en el lugar de los hechos. En total, cinco agentes que han puesto de manifiesto que había "mucha sangre" en la calle y en las escaleras del portal, y que llegaba hasta el primer piso. De su testimonio también se ha podido saber que el cuchillo con el que el acusado presuntamente apuñaló a su compañero de piso nunca fue encontrado. 

 

"Si no hubiera tenido asistencia urgente habría muerto"

Por su parte, dos médicos forenses han confirmado que si el agredido no hubiera recibido asistencia sanitaria urgente, habría fallecido. Y es que, han apuntado que dos de las heridas que presentaba eran de "riesgo vital", no solo por la zona en la que se encontraban, sino por su "profundidad". 

Al respecto, han detallado que el joven sufrió un neumotórax, un hemotórax y un enfisema como consecuencia de las heridas que presentaba en la espalda y en el costado. "¿Si no se hubiera manejado con urgencia podría haber muerto?, les ha preguntado la fiscal. "Si no hubiera tenido asistencia urgente, sí", han respondido. 

Además, los médicos forenses han puesto de manifiesto que las heridas que presentaba la víctima serían "compatibles" con los hechos que ha relatado. 

 

La defensa pide que se aplique la pena mínima

Así, el Ministerio Fiscal ha elevado a definitivas sus conclusiones, solicitando para el acusado una pena de ocho años de prisión, así como una indemnización para la víctima de 10.765 euros. Por su parte, la defensa se ha "conformado" con el delito de intento de homicidio del que se acusa a su defendido, pero ha pedido que se le aplique "la pena mínima", que sería de dos años y medio de cárcel. 

Y es que, el abogado de I.A. considera que concurre la atenuante de embriaguez, algo que sin embargo ha sido rechazado por el Ministerio Fiscal.  "No basta con beber, sino que hay que acreditar la influencia que tuviera y no hay ninguna prueba. No sabemos qué bebió, cuánto bebió y si eso influyó", ha señalado la fiscal. 

Asimismo, ha indicado que "lo posterior no concuerda", ya que considera que "si se dio a la fuga, algo consciente debía ser de lo que había hecho". "Se va y no regresa más. No vuelve por la casa y dice que sus compañeros no le dijeron que la víctima estaba ingresado", ha añadido la representante del Ministerio Público, que ha insistido en el "ánimo de matar" del acusado y en la "gravedad" de las heridas que presentaba su compañero. 

"Discrepamos", ha manifestado por su parte el abogado defensor, que sí cree que "ha quedado acreditada la intoxicación" etílica de su defendido, ya que la propia víctima ha manifestado en el juicio que su agresor "estaba muy borracho" y que cree que "si no no hubiera ocurrido". Con todo ello, el juicio ha quedado visto para sentencia.