La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas juzga el próximo martes 28 de marzo en Arrecife a Clemente Nieves Eugenio, el dueño de una carpintería de San Bartolomé acusado de un delito de apropiación indebida del dinero de sus clientes. La Fiscalía pide una pena de ocho años de prisión y el pago de una multa de 3.600 euros. Estaba previsto que este juicio se celebrase el 15 de diciembre de 2016, pero finalmente se suspendió y se tuvo que fijar una nueva fecha.
Los hechos que ahora se juzgan ocurrieron entre 2006 y 2007, cuando Clemente Nieves Eugenio gestionaba en exclusiva el taller de carpintería ‘El Carpintito’, en San Bartolomé. Según el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, el acusado "aceptó en nombre de la empresa una serie de trabajos, recibiendo de los clientes determinadas cantidades de dinero en concepto de anticipo para su realización, valiéndose de su credibilidad profesional y de las relaciones de confianza que mediaban entre ellos". Sin embargo, según el fiscal, luego no llegaba a realizar los trabajos o en algunos casos sólo entregaba los materiales.
El escrito de acusación señala que Clemente Nieves Eugenio "incorporó a su patrimonio" más de 13.300 euros que le entregaron seis clientes por distintos encargos. Las cantidades entregadas oscilan entre los 1.000 euros y los 4.700 euros. En el montante total se incluyen "unos billetes de avión por importe de 1.300 euros", que uno de los clientes "adquirió para el acusado a cuenta de la fabricación y montaje de dos muebles de baño y el forrado de dos armarios empotrados". El carpintero le llegó a entregar "únicamente, sin montar, los materiales, que no han sido pericialmente tasados". El fiscal pide que el acusado abone el dinero entregado, restando la cuantía de los materiales en aquellos casos en los que les hizo entrega de los mismos.
El acusado ya tiene dos condenas firmes por otros delitos, según recoge el escrito de Fiscalía. Así, en febrero de 2011 fue condenado a cuatro años de prisión por un delito de lesiones y a cinco años y medio de prisión por robo con violencia y detención ilegal. En diciembre de 2011 fue condenado nuevamente a un año de prisión, en este caso por un delito de robo con fuerza en las cosas.