Una patera ha volcado este martes cuando estaba a punto de alcanzar las costas de Lanzarote y más de una treintena de inmigrantes han caído al agua, iniciándose un dramático rescate que se ha saldado con varios fallecidos. "No saben nadar", advertía una voluntaria que se encontraba en la zona.
El suceso se ha producido sobre las 19,30 horas en una zona rocosa cerca del muelle Órzola, y han sido los gritos los que han alertado a los vecinos y a los servicios de emergencias, que precisamente se encontraban en la zona para realizar el traslado de los inmigrantes llegados durante la mañana a La Graciosa.
Unas 20 personas, entre ellas también algunos jóvenes de la zona, se han lanzado al agua y han conseguido rescatar con vida a 28 personas. Hasta la noche del martes habían sido localizados cuatro fallecidos y seguía habiendo varios desparecidos, ya que en total viajaban unas 35 en la patera, según han relatado los supervivientes. Según esos testimonios, en la embarcación había mujeres y niños.
Tras unos minutos de angustiosa búsqueda en el mar, las personas que han participado en el rescate han ido saliendo del agua. La peligrosidad de la zona, unida a la marea que estaba subiendo y a la oscuridad, les ha impedido continuar la búsqueda, al no encontrar rastro de más personas. “Esto es un infierno”, relataba un testigo.
En la costa, se han vivido escenas de personas rescatadas llorando e incluso vomitando y teniendo que ser atendidas por los servicios sanitarios. Y en el mar, la duda de los migrantes que han podido perder la vida sin ser rescatados.
Dos de las personas que han participado en el rescate han relatado que han escuchado gritos en el agua pero cuando se estaban acercando a la zona de dónde procedía el sonido, han dejado de escuchar los gritos y tampoco han conseguido localizar el cuerpo.
En cuanto a los dos primeros cuerpos que han sido recuperados sin vida, al llegar hasta la costa se han movilizado los sanitarios para intentar reanimarlos, pero ya sin éxito.
El tercer cadáver se ha recuperado ya pasadas las 21 horas por parte de los bomberos del Consorcio de Seguridad y Emergencias, que se han hecho cargo de continuar la búsqueda en el agua tras retirarse los primeros voluntarios.
Además, hasta la zona se ha desplazando un helicóptero y un dron para ayudar en esa búsqueda, que ya entrada la noche ha permitido localizar a otro fallecido. Finalmente, el dispositivo se ha suspendido cerca de las 23 horas y se retomará a las 7 de la mañana del miércoles.