Sucesos

Una vecina de Arrecife, desesperada al no poder contactar con su hija que vive en Nueva York: "Cada vez tengo más miedo"

Gumersinda Peña, una vecina de Arrecife, lleva dos días sin poder contactar con su hija, Yolanda Cabrera Peña, de 26 años, que vive en Nueva York, donde se acaban de sufrir los efectos de la tormenta ...

Una vecina de Arrecife, desesperada al no poder contactar con su hija que vive en Nueva York: Cada vez tengo más miedo

Gumersinda Peña, una vecina de Arrecife, lleva dos días sin poder contactar con su hija, Yolanda Cabrera Peña, de 26 años, que vive en Nueva York, donde se acaban de sufrir los efectos de la tormenta "Sandy". Gumersinda lleva más de 24 horas llamando a su hija al móvil, pero las comunicaciones "están imposibles". Su miedo y desesperación va aumentando a medida que pasan las horas.

Gumersinda y su familia han contactado con la Embajada española en Nueva York, con Cruz Roja, con la policía y con consulados. Ya no saben a dónde llamar para poder encontrar a Yolanda, que lleva viviendo desde los 16 años en Nueva York y tiene dos hijos, de siete y nueve años.

También han intentado contactar con su pareja, pero de momento no han podido. "Lo hemos intentado por todas las vías, pero estamos desesperados y no sabemos nada. Esperamos que todo quede en un susto, pero yo cada vez estoy más asustada y ya no puedo más", afirma su madre.

Gumersinda asegura que es "horrible" no saber nada de su hija. Mientras tanto, todas las noticias que escucha en los medios de comunicación hablan de "caos" en Nueva York por el paso de esta tormenta. Además, hay miles de evacuados y ni siquiera sabe si su hija ha tenido que salir de Nueva York con su familia para refugiarse de la tormenta. También ha habido muertos por el paso de esta tormenta, al menos 16, y el presidente Barack Obama ha declarado a Nueva York "zona catastrófica".

Yolanda trabaja en una escuela del Bronx como voluntaria. "Lo que oímos de esta parte de Nueva York es que se ha inundado y cada vez tengo más miedo", confiesa su madre, que precisamente este año, por problemas de salud, ha sido el primero que no ha podido viajar a visitar a su hija.