Un cochino negro suelto sorprendió el viernes a los conductores que transitaban por la carretera que une Arrecife y San Bartolomé y obligó a la Policía Local a intervenir para capturarlo. El animal no ha sido reclamado hasta ahora por su dueño y este lunes iba a ser trasladado a la Granja del Cabildo, ya que inicialmente se le alojó en las instalaciones de la perrera municipal, pero estaba "destrozando" los muros de la misma.
Fue una vecina quien el viernes avisó a la Policía Local de que el animal se encontraba caminando por la carretera, ante lo que los agentes se desplazaron a la zona. Una vez capturado, el cochino fue trasladado a las instalaciones de la perrera municipal "de manera excepcional". Y es que, según han explicado desde el Ayuntamiento, debía haberse llevado a la Granja del Cabildo, pero la primera institución "sólo acoge animales muertos los fines de semana, no vivos".
No obstante, este lunes estaba previsto su traslado a la Granja del Cabildo pues, además, el animal estaba "destrozando los muros" de las instalaciones de la perrera, según han confirmado desde el Ayuntamiento. Desde el Consistorio han apuntado además que si el dueño del animal no aparece en 48 horas, el cochino será sacrificado según establece la normativa. En tal caso, el Ayuntamiento de Arrecife ha pedido que la carne se done a la ONG Calor y Café.