La empresa Canal Gestión ha sido denunciada por la Guardia Civil ante la Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural (Apmun) por un vertido de aguas fecales en el Charco de San Ginés. Esta denuncia se suma además a otra presentada el pasado mes de agosto también por el Seprona ante el mismo organismo, por otro vertido en Punta de los Vientos.
En el caso del vertido en El Charco, tuvo lugar el martes de la pasada semana, tras el fallo de la estación de bombeo de la calle León y Castillo que gestiona la empresa. Según han señalado desde la Guardia Civil a La Voz, Canal podría haber cometido una infracción administrativa de la Ley de Costas por un "vertido de aguas residuales en dominio público marítimo-terrestre".
Esa norma prohíbe específicamente en su artículo 56.3 el vertido de "residuos sólidos y escombros al mar y su ribera, así como a la zona de servidumbre de protección, excepto cuando éstos sean utilizables como rellenos y estén debidamente autorizados". La Apmun, que es la administración a la que corresponde sancionar estos hechos, deberá tramitar ahora la denuncia de la benemérita.
Las multas o sanciones que establece la Ley de Costas son en su mayoría económicas y su cuantía varía en función de la infracción cometida. Esas sanciones pueden ascender hasta los 300.000 euros para infracciones muy graves.
Previamente a las diligencias de la Guardia Civil, fue la Policía Local de Arrecife el primer cuerpo policial en investigar los hechos ocurridos en El Charco. Según ha confirmado la propia Benemérita, fueron los agentes municipales los primeros en llegar y realizar "el informe y la inspección ocular". La Guardia Civil se trasladó después al lugar y tras "comprobar la situación y cotejar" con los informes de los policías municipales, dio traslado de la denuncia a la Apmun.
Vertido "incontrolado" en Punta de Los Vientos
Además, el Seprona denunció el pasado 19 de agosto a Canal Gestión por un vertido "incontrolado" en Punta de los Vientos. La sustancia vertida fue bicarbonato cálcico, que la empresa utiliza para limpiar tuberías. Según la Guardia Civil, aquel día constataron que había terminado en el mar.
En este caso, según confirman desde la Guardia Civil, el vertido supondría una infracción del artículo 38 de la Ley de Residuos de Canarias, por lo que dieron traslado de los hechos a la Apmun.