La Guardia Civil registró el pasado viernes la oficina del marido de Romina, en prisión provisional imputado como presunto autor de la muerte de la joven, e incautó diverso material informático, incluyendo ordenadores, según han confirmado fuentes cercanas a la investigación.
Ahora, la labor de Benemérita se centra en analizar dichos equipos en busca de nuevas pistas para esclarecer el caso, así como de todo lo encontrado en las inspecciones que ya se han realizado en la vivienda en la que el matrimonio residía en la urbanización El Palmeral de Costa Teguise y en el coche que Raúl Díaz Cachon alquiló para supuestamente deshacerse del cuerpo de la joven.
Sobre el resultado de dichas inspecciones, no ha trascendido por el momento nueva información aunque, en el caso de la vivienda conyugal, tal y como ya informó La Voz, se encontraron indicios de que el marido de Romina pudo haber intentado borrar huellas de lo ocurrido. Según fuentes cercanas a la investigación, parte de la casa había sido pintada recientemente. Además, la Guardia Civil también comprobó que Raúl Díaz Cachón había comprado sosa cáustica en los días posteriores a la desaparición de la joven.
En el caso del vehículo de alquiler que el marido de Romina afirmó haber utilizado para deshacerse del cuerpo de Romina y con el que se comprobó que recorrió unos 1.000 kilómetros en cuatro días, ya había sido inspeccionado por un perro especializado en la búsqueda y localización de restos cadavéricos, el cual "marcó" el coche, pero el viernes fue inspeccionado en profundidad en busca de restos biológicos de ADN que certificasen si efectivamente el vehículo fue utilizado para transportar los restos de la joven.
La búsqueda en el mar se suspendió en busca de nuevos indicios
Hay que recordar que el marido de Romina confesó haberse deshecho de su cadáver, pero negó haber participado en su muerte, asegurando que se la había encontrado muerta al regresar a casa el 1 de enero, después de haber abandonado la vivienda horas antes tras haber mantenido una discusión con su mujer. En esa declaración, Raúl Díaz Cachón dio detalles de cómo supuestamente se había deshecho del cuerpo de su mujer, asegurando que había arrojado los restos en distintos puntos del litoral.
Sin embargo, los rastreos llevados a cabo por la Guardia Civil en el mar en la zona de Los Hervideros y de Los Ancones no dieron resultados y, después de tres jornadas, la Benemérita decidió suspender cautelarmente la búsqueda el pasado jueves hasta encontrar nuevos indicios, ya que los investigadores no tenían acreditado que efectivamente el marido de Romina se hubiese deshecho del cuerpo arrojándolo al mar.
"Este casi me mata, la siguiente no creo que lo cuente"
Además de estar imputado por asesinato u homicidio, al considerar la juez del Juzgado de Instrucción número 1 de Arrecife que hay indicios de que quitó la vida a su mujer, Raúl Díaz Cachón se encuentra en prisión provisional desde el pasado 16 de enero acusado también de un delito de matrato habitual. Y es que, al menos consta una denuncia que Romina presentó en agosto contra su marido por malos tratos
Además, la Guardia Civil también había podido comprobar que Romina había acudido dos días antes de su muerte a Urgencias del Hospital Doctor José Molina Orosa con diversas heridas que podrían ser fruto de una posible agresión. Aunque según fuentes cercanas a la investigación la joven se acabó marchando del centro porque tardaban en atenderla, Romina envió mensajes a un familiar coincidiendo con dicha visita al hospital en los que afirmaba estar "golpeada por todos lados", según informó La Provincia. "Este casi me mata, la siguiente no creo que lo cuente", decía en esa conversación de Whatsapp.