La alerta naranja por fenómenos costeros adversos decretada para este miércoles ha dejado sus primeras secuelas en Arrieta. Allí, la fuerza del mar se ha llevado por delante uno de los pilares del muelle de madera de la playa de La Garita, que ha tenido que ser cerrado "por seguridad".
"Lo que hemos hecho es asegurarlo y evitar que nadie pueda entrar", explican desde el Consorcio de Emergencias. La ONG REN, que actúa en el norte, también ha ayudado con la incidencia. Su director, Juan Fajardo, ha explicado que el pilar "se partió porque hay mucho oleaje, con mucha fuerza".
Las barandillas del puente "quedaron colgando" tras el golpe de mar, cuenta. El REN había precintado ya el puente cuando recibió la alerta para evitar problemas, ahora, ante este suceso, se han encargado de "cerrarlo y vallarlo" para evitar que ningún peatón ni "ningún chiquillo" entre, para que no haya que lamentar más incidentes.
Además, el REN ha explicado que mantiene todas las playas del norte de la isla cerradas y tiene a 5 personas patrullando con sus vehículos para asegurarse que todo se desarrolla sin problemas.