Están a punto de entrar en la adolescencia, pero piensan en algo más que cantantes de moda, fútbol o videojuegos, aunque como niños que todavía son, les gusta disfrutar de las cosas típicas de su edad, más aún en un espacio natural como Lanzarote, en el que pueden jugar al aire libre tan a menudo. Tienen 12 y 13 años y están especialmente dotados para las Matemáticas, eso es lo que dicen los resultados de la "Prueba de Detección de Talentos de Matemáticas" que realizaron el pasado 6 de junio en el instituto Blas Cabrera Felipe de Arrecife.
Son 25 niños y niñas que demuestran brillantez para resolver problemas matemáticos tanteando distintos caminos, que los lleven a la respuesta, un ejercicio para la mente y un estímulo para crear en los muchachos una buena afición: el gusto por el pensamiento.
Gracias a esa capacidad, estos amantes de las matemáticas, participarán durante los dos próximos cursos en el programa ESTALMAT. "Sé que consiste en buscar chicos de la E.S.O. que tengan un talento para las matemáticas y ayudarles a estimular su talento", así de claro lo tiene Jorge Fued, uno de los muchachosseleccionados, que da su explicación sobre el significado de las siglas con las que se conoce el programa de "Estímulo del Talento Matemático", que para uno de los profesores de matemáticas del colegio Arenas Internacional de Costa Teguise, es la búsqueda del "nuevo Indomable Hill Hunting", recordando al chico difícil pero genio de las matemáticas interpretado por Matt Damon en la película de Gus Van Sant.
El programa ESTALMAT nació en Madrid, en 1998 de la mano del Catedrático de la Universidad Complutense Miguel de Guzmán Ozámiz y desde entonces se han unido a la iniciativa otras Comunidades Autónomas. Canarias forma parte del proyecto desde 2005 y Lanzarote ya cuenta con un primer grupo académico que iniciará su segundo año en el programa.
El proyecto en Lanzarote
Dos entusiastas de las matemáticas y de la enseñanza decidieron embarcarse en la iniciativa en la isla. Antonio Jover Montiano yAntonia Betancort González gestionan el programa en Lanzarote desde el instituto en el que enseñan matemáticas, el Blas Cabrera Felipe de Arrecife. Para ellos ver un grupo en el que todos los alumnos muestran un gusto especial por el trabajo, se motivan ante un nuevo problema que resolver y participan activamente en la clase exponiendo sus opiniones, es un lujo."Es una de las cosas que sorprende a todos los profesores que vienen, el comprobar que efectivamente puede haber 25 alumnos escuchándote atentamente, que preguntas algo y todos te contestan. Te sorprende y lo agradeces, no hay palabras", afirma Antonio mientras su compañera asiente con la cabeza, "es un gustazo" ratifica Antonia.
Los chavales seleccionados se reunirán durante dos horas un día a la semana. Para cada sesión acude un profesor diferente, con un reto matemático que los alumnos conocen desde la semana anterior, para que vayan pensando posibles maneras de resolverlo. "En cada sesión el profesor tienen que hablar de las dificultades que ha encontrado él para resolverlo e indicarles estrategias que pueden aplicar", aclara Antonio Jover.
Este curso han pasado por el aula de "aficionados a las matemáticas" 11 docentes de toda la isla, incluído un jovencísimo profesor, Rens Malesys, estudiante de bachillerato y vencedor de las Olimpiadas Matemáticas de Canarias, que se encargó de una de las sesiones mostrandouno de los problemas que tuvo que resolver en las Olimpiadas estatales celebradas en Sevilla.
Hacer nuevos amigos
Además de estimular el talento especial que estos muchachos tienen para la ciencia exacta, formar parte de ESTALMAT supone para ellos una oportunidad de encontrar nuevos amigos con los que compartir una afición nada común entre los preadolescentes. Es un punto muy importante para ellos, según explica la profesora Antonia Betancort, "a algunos sus compañeros los ven como un cerebrito, y que ellos comprueben que no están solos es muy importante. Se sienten aislados, sobre todo los chicos, porque hay más presión de pertenecer al grupo".
"¡Vamos a conocer a otras niñas!", así de encantado se mostraba Francisco Rodríguez, uno de los 25 seleccionados y alumno del I.E.S Tinajo. Este también puede ser un estímulo beneficioso para los niños del programa, ya que facilita la posibilidad de que conozcan a otros compañeros de distintos puntos y centros de la isla. Pero no sólo de Lanzarote, porque al finalizar cada uno de los dos cursos académicos, los participantes de ESTALMAT en toda Canarias, disfrutan de unas jornadas de convivencia, en las que no falta la diversión... y las matemáticas.
Adoran las matemáticas desde pequeñas
Son de la misma clase, han estudiado 1º de la E.S.O. en el colegio Arenas Internacional de Costa Teguise y han sido elegidas junto a otros 3 compañeros de su mismo centro para el programa de talentos. Rocío Garrigósy Natalia Sánchez comparten su afición por las matemáticas y su madurez cuando de estudiar y sacar buenas notas se trata. Dicen que no estudian mucho matemáticas en casa, " en clase nos explican muy bien, entonces ya se entienden y con repasar un poco en casa vale" asegura Natalia.
Ninguna de las dos teme que el curso que viene tengan carga doble de deberes que hacer, Rocío explica el motivo de su tranquilidad, "yo me he estado informando en internet porque soy muy curiosa. Ahí he visto que ESTALMAT no te va a quitar tiempo para los deberes del colegio, porque son conocimientos extra que vas aprendiendo con juegos...". Natalia reconoce que lo pasó malcuando empezó la prueba, "nos dieron un montón de papeles para hacer los problemas y ahí me puse nerviosa, pero luego me relajé porque iba para probar, si no salía bien tampoco era grave".
Las dos reconocen que les gustan las matemáticas desde siempre. "Mi padre tiene promotoras y yo me ponía con él a mirar facturas, quiero ser economista" apunta segura Rocío, a quien releva Natalia contando que su madre es maestra y ella se "ponía al lado de ella para ver cómo preparaba las clases". Son estudiantes buenas en todo y piensan repasar este verano. Rocío se lleva las matemáticas de crucero con sus padres y a la península y Natalia compaginará los números con su otra afición: escribir poesía, "ya tengo un libro con mis poesías".
Quiere ser científico para saber en qué consiste la materia
Jorge Fued Pinillo vive en Arrecife y estudia en el I.E.S. Blas Cabrera Felipe. Allí mismo realizó la prueba junto a otros niños de la isla. Tiene 12 años y le encanta leer libros de ciencia ficción, "de Harry Potter me los he leído todos". Asegura que le gusta "los mundos imaginarios de las novelas y sus personajes".
Tiene muy claro que de mayor quiere ser científico porque "me gustaría saber en qué consiste la materia", sobre todo le gusta la química. Confiesa que sus notas no son muy buenas en otras asignaturas, pero si hablamos de matemáticas y ciencias naturales, la cosa cambia, para convertirse en un estudiante aplicado.
Explica que fue su profesor quién le propuso participar en la prueba de selección para el programa de estímulo de las matemáticas y que cuando empezó el examen, le pareció difícil, "algunos problemas yo no los entendía bien, el último me costó mucho trabajo", pero Jorge entiende que los ejercicios de la prueba son diferentes a los que hace habitualmente en clase, "dicen que son así para ver cómo intentamos hacerlos, cómo pensamos".
Asegura que uno de los motivos por los que le apetece participar en las clases de estímulo es para conocer gente en el curso "con la que compartir ideas, porque no hay muchosa los que les gusten las matemáticas, mas bien las odian". Aunque a él la ciencia exacta le gusta, afirma rotundo que no va a estudiar matemáticas en todo el verano, "me quedo en Arrecife", pero prefiere ver la tele o salir con sus amigos, aunque empezará con ganas el próximo curso.
En Tinajo también hay talentos matemáticos
Francisco Rodríguez Guillén es más hablador que sus compañeros de instituto Álvaro Blanco y Tanausú Aguiar. Son tres de lossiete alumnos del I.E.S. Tinajo que superaron con éxito la prueba de ESTALMAT.
A Francisco lo que más le gusta es "salir por ahí con mis amigos, meterme por las vegas con la bici y jugar al fútbol". Este verano no va a tener tiempo para estudiar porque se va al País Vascocon su equipo de fútbol unos días y después lo espera su primo en Fuerteventura para disfrutar del resto del tiempo libre hasta que comiencen las clases de 2º de la E.S.O. y las sesiones de estímulo de matemáticas. Cree que es una materia que "no es para estudiarla, sino para comprenderla y confía en que las clases extra "serán para aprender cosas no para que nos pregunten ¿no?".
Álvaro vive en Tiagua. Cuando searranca a hablar confiesa que una de sus mayores aficiones es jugar a la Play Station. No sabe a qué le gustaría dedicarse de mayor, "pero algo que tenga que ver con las matemáticas o las ciencias", porque saca muy buenas notas, especialmente en estas asignaturas. Sus dudas en cuanto a su futura profesión contrastan con la decisión de su compañero Tanausú, que asegura querer ser biólogo. También siente especial predilección por las ciencias porque según explica, le cuesta más estudiar historia que hacer ejercicios de matemáticas.
Ninguno de los tres se preparó de manera especial antes de acudir a la prueba, porque "total no sabíamos lo que iba a caer", concluye Francisco.