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Pide al Cabildo que su finca se excluya con "urgencia" de un espacio de caza en Lanzarote

Norberto Cadavid , residente en San Bartolomé, arrendatario y trabajador de la finca Morro de Chibusque denuncia una nueva agresión por parte de un cazador el pasado 27 de junio

Eider Pascual

Periodista

La finca Morro de Chivusque, situada en La Vegueta

Norberto Cadavid Ramírez, residente en San Bartolomé, arrendatario y trabajador de la finca Morro de Chibusque, situada entre El Islote y La Vegueta, ha solicitado mediante un escrito al Cabildo de Lanzarote que su finca y los terrenos de aprovechamiento cinegéticos común se "excluyan de la zona libre de caza con urgencia", en un documento al que ha tenido acceso La Voz.

En la misma petición, el ciudadano pide que se señalice perimetralmente la finca y que se comunique su solicitud a los cazadores con licencia de caza expedida por el Cabildo Insular. El objetivo principal de la demanda es "evitar nuevos incidentes y frenar la escalada de violencia" que ha tenido que vivir durante años, según ha señalado Norberto.

El trabajador de la finca sigue viviendo con "miedo" tras la última visita de los cazadores a los alrededores de la casa. Tras denunciar violentas agresiones verbales y físicas junto con ataques racistas, el hombre refiere que hace menos de un mes, el pasado 27 de junio, volvió a ser atacado por un nuevo cazador. 

El varón se encontraba en la finca en torno a las 19.30 horas de ese día cuando un cazador presuntamente entró en su terreno con sus perros para disponerse a cazar. En la denuncia que presentó Norberto ante la Guardia Civil, declaró que le pidió al cazador que abandonara la finca y que el agresor se puso "agresivo", hasta el punto de intentar tirarlo al suelo y golpearle con puñetazos y con piedras.

De acuerdo con el parte de lesiones al que ha accedito esta redacción, la situación le provocó varias lesiones y heridas en algunas partes del cuerpo. Entre ellas, un puñetazo en el ojo izquierdo, una herida en la muñeca derecha y en el tercer dedo de la mano izquierda, son las lesiones que constan en el parte que presentó el trabajador. 

Además, los perros de los cazadores también intentaron atacar a sus gallinas, durante el incidente al que acudieron agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil. Norberto destaca que el valor de las gallinas perdidas durante los altercados oscila entre los 500 y 600 euros

 

Otra agresión en abril de 2021

Como ya publicó La Voz el pasado 6 de junio, el ciudadano lleva aproximadamente "cinco años" denunciando una situación que para él se hace "insostenible": la pérdida de su ganado durante las actividades de caza. Cuando Norberto reclama a los cazadores que dejen de entrar en el terreno privado, puesto que "no es una zona de caza", empieza el "calvario". 

"Eres una basura, la finca no es tuya, vete lejos de aquí", son algunos de los comentarios a los que se tuvo que enfrentar en una de las ocasiones, que fue abordado por un grupo de tres cazadores armados con cuatro perros. 

Uno de los sucesos más "violentos" que tuvo que vivir, ocurrió el 7 de abril de 2021, cuando se encontraba trabajando en la finca. Según recoge la denuncia interpuesta por Cadavid, un cazador se aproximó con su vehículo y sus perros a realizar sus labores de caza a las inmediaciones de la vivienda. En ese momento, el trabajador le dejó claro al denunciado que "no podía estar allí".

Una respuesta que al cazador le "sentó muy mal" y por la que comenzó el intento de agresión física y psicológica. "Apareció con un palo con la punta de hierro en la mano y estaba dispuesto a agredirme", ha desvelado. Cadavid acabó herido en la mano por un golpe que le propinó el cazador con el palo, cuando se dispuso a grabar lo ocurrido con el teléfono móvil. Acto seguido, siguió la agresión, en la que el denunciado retrocedió y cogió unas piedras e intentó lanzar a Norberto, aunque él logró esquivarlas.

Unos minutos más tarde, Norberto consiguió acercarse a la casa, pero seguía perseguido por el cazador. "Coño la madre, hoy lo mato como sea, de hoy no pasa, por la noche vengo y le prendo fuego a la casa", gritaba mientras abordaba al denunciante con su vehículo. Según declaró Norberto, estas fueron otras de las palabras pronunciadas por el cazador: "Estaba bien hacerle desaparecer y matarlo, colombiano hijo de puta"