Muchos son los fenómenos de la naturaleza que llevan a un ser humano a mirar al cielo. Hace escasos días, un inusual episodio de auroras polares cautivó a la población de Canarias (y también del resto de España). Móviles y cámaras digitales en mano pudieron hacerse eco por primera vez de cómo una tormenta geomagnética teñía de colores rojizos el cielo en las islas. Sin embargo, solo un grupo de privilegiados expertos pudo verlo desde uno de los centros de observación astronómica más importante de Europa.
Mar Carretero Castrillo es una astrofísica conejera que estudia un doctorado sobre altas energías en la Universitat de Barcelona. Durante el reciente episodio de auroras boreales en las Islas, Carretero estaba trabajando en una investigación en el Observatorio del Roque de los Muchachos en La Palma y pudo captar desde los telescopios MAGIC cómo se reflejaban las auroras.
Estos telescopios forman parte de una colaboración liderada por diferentes países entre los que están España, Italia, Alemania, Japón y Brasil. "En los telescopios hay miembros científicos de todos estos países y cada mes van enviado a un grupo de cuatro personas a observar por los telescopios", asegura.
Este año, Mar Carretero se encarga de liderar y controlar a los operadores que llegan por primera vez a los telescopios de La Palma. Al mismo tiempo, sigue haciendo su trabajo de investigación por su cuenta.
En física existen diferentes tipos de radiaciones conocidas como ondas electromagnéticas, aunque no todas son del mismo tipo o intensidad. Por ejemplo, "tenemos la típica luz que todos podemos ver, pero luego hay otras como las ondas de la radio, del microondas que usamos para calentar la comida o los rayos X de cuando nos hacemos una radiografía", explica. Dentro de todas las ramas de la astrofísica, la suya se dedica al estudio de los fenómenos "más energéticos del universo", que se miden en rayos gamma.
Ahí es donde entra su investigación. Frente a otros tipos de especializaciones de la astrofísica, su labor se trata de analizar agujeros negros en el Universo y, en concreto, en el estudio de "sistemas binarios de alta energía", donde una estrella mucho más grande que el Sol está junto a un agujero negro, orbitando el uno junto al otro. Estos "fenómenos son más violentos, porque el agujero negro se va comiendo el material que tiene cerca y produce explosiones que dan lugar a estos rayos gamma".
Por el momento, la astrofísica canaria explica que solo se han encontrado nueve sistemas binarios de alta energía en nuestra galaxia y en el Universo en general. "Son poquitísimos para lo grande que es la galaxia", indica. Su investigación busca encontrar más sistemas de este tipo, analizar sus comportamientos y descubrir por qué generan estas energías tan altas, que no se pueden crear en la Tierra.
"La pregunta es: ¿qué hay en estos objetos para que se pueda crear una energía tan potente, tan fuerte? Está pasando algo que se acelera las partículas a una velocidad muy alta y que emite energía de rayos gamma. Básicamente es entender cómo se mueven y se comportan estos objetos, qué está pasando ahí, cómo se crean estas energías tan alta", detalla su investigación.
El trabajo de esta astrofísica lanzaroteña está siendo recibido con buenos ojos. Ya ha publicado un artículo científico al respecto y está a punto también de enviar un segundo informe. La buena recepción en el mundo científico le ha llevado ya a dar más de una decena de conferencias en Barcelona, Alemania, Chile, varias en Canarias, Francia y Argentina.
Entre los reconocimientos que ha recibido, está el de la Unión Astronómica Internacional, la organización más importante a nivel mundial en Astronomía, que la ha invitado a dar una conferencia este verano durante la celebración de un evento en Ciudad del Cabo (Sudáfrica).
Canarias, epicentro de la observación espacial
Anualmente Mar Carretero pasa de 15 días a un mes en La Palma, la astrofísica cambia por completo su rutina y se muda al punto más alto de la isla canaria, a 2.396 metros de altitud. Desde allí, destina las noches, desde que el Sol se pone hasta que vuelve a salir, para investigar parcelas del espacio y tomando observaciones.
En ese tiempo, cuenta con un calendario que le indica un orden con los puntos a los que mirar durante las diferentes horas de la noche. "A esta hora tienes que observar esta galaxia, después te vas a ir a centrando en este otro objeto que es una estrella, que a su lado tiene un agujero negro, por ejemplo, o en una supernova que es una estrella que ha explotado", resalta.
Luego, se traslada a la Universitat de Barcelona, donde analiza y estudia los resultados.
Canarias es uno de los puntos del mundo donde mejor se observan los cielos, porque las islas concentran diferentes condiciones que así lo hacen posible. El Observatorio de La Palma, se suma al de "Tenerife, Chile, Hawái y Sudáfrica como los puntos del planeta donde hay mejor observación".
Entre ellas, la altura de islas como Tenerife o La Palma, la calidad lumínica de los cielos palmeros, ante la falta de grandes ciudades y la posibilidad de que el mar de nubes deje en cotas más bajas los fenómenos como tormentas hace de este lugar un privilegio.
El inusual episodio de auroras polares en Canarias
El extraordinario fenómeno de auroras boreales en Canarias, que fue fotografiado por Mar Carretero, se originó a raíz de una tormenta solar. "El Sol tiene a veces eyecciones de las partículas de su masa por las tormentas solares y si la Tierra está alineada con el Sol cuando se produce esta erupción, llega hasta la Tierra e interaccionan con el campo magnético terrestre, creando estas luces", relata la astrofísica conejera.
En esta línea, explica que "normalmente, estos fenómenos se dan en las latitudes altas de la Tierra, que son las del norte y el sur del planeta, porque allí el campo magnético es más intenso y está más cerca de la superficie".
Para que las auroras llegaran a formarse en Canarias, más cerca del ecuador terrestre que del polo norte, "la tormenta solar que hubo fue muy intensa, mucho más de lo normal".
En el caso de Canarias, las luces que pudieron verse fueron de color rojo. "En Canarias, básicamente las partículas del Sol que están interaccionando para crear estos colores, interaccionaron con el oxígeno a grandes altitudes", relata, mientras que en otras localizaciones esa interacción se dio a más cerca del suelo.
Las tormentas solares tienen su máxima actividad cada once años, coincidiendo justamente en este periodo 2024-2025. Estas tormentas pueden producir no solo auroras boreales sino también fallos en los satélites y las comunicaciones por radio. Sin embargo, en esta ocasión ha sido más fuerte que en periodos anteriores.
En este momento, la científica lanzaroteña logró fotografiar con su móvil este fenómeno, con la Vía Láctea por detrás del telescopio.