Los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de limpieza de Yaiza han convocado una huelga "indefinida" a partir de este viernes, 6 de mayo. Los empleados de Hernández Bello S.L. en Yaiza afirman que son los "peor pagados" dentro del sector en la isla y denuncian una serie de "incumplimientos" por parte de la empresa a la hora de abonarles complementos salariales o proporcionarles material de trabajo. El jueves está prevista una reunión entre la empresa y representantes sindicales de los trabajadores. Según el resultado de esa negociación, si alcanzan un "acuerdo firmado", podrá darse un "aplazamiento" de la huelga, pero, según ha adelantado uno de ellos a La Voz, los trabajadores no la desconvocarán.
Así, si finalmente la huelga comienza este próximo viernes, los trabajadores de Hernández Bello S.L. en Yaiza cubrirán exclusivamente los servicios mínimos, consistentes en la "recogida de basuras en colegios y centros de salud" del municipio, señala este empleado. Ante los posibles "daños" que esto pueda ocasionar a la ciudadanía, los trabajadores de limpieza han pedido "disculpas a todos los vecinos". Desde el Ayuntamiento, han avanzado que el Consistorio está "al día" en los pagos a la empresa y que trabajarán para "garantizar el cumplimiento" de los servicios mínimos.
Esta situación afecta a un total de 12 trabajadores del servicio de limpieza de Yaiza. Así lo explica Basilio Pacheco, uno de esos empleados que, junto con sus compañeros, fueron "subrogados" cuando Hernández Bello S.L. resultó adjudicataria del servicio en mayo de 2012. Este empleado había trabajado para las dos empresas que gestionaron anteriormente la limpieza en el municipio, pero afirma que los "problemas" comenzaron con la llegada de esta compañía de Tenerife.
"No han cumplido lo firmado", asegura, afirmando que la empresa no les está "pagando la antigüedad", la "nocturnidad" o la "subida de sueldo" que les correspondería cada 5 años. A juicio de este empleado, los trabajadores están "abandonados" por Hernández Bello S.L. en algunos aspectos. Entre los ejemplos de ese ‘abandono’, alude a los uniformes. "No tenemos ni ropa de abrigo, llevamos cuatro años esperándola", critica.
Según relata Pacheco, él y sus compañeros carecen de un convenio específico y se rigen por el "convenio estatal", pero denuncia que éste no se cumple. Este trabajador achaca toda la responsabilidad a la empresa, dado que "el Ayuntamiento está cumpliendo con los pagos". Según explica, han mantenido "varias reuniones" con la compañía para trasladarles sus reivindicaciones, pero sus respuestas no les han satisfecho y finalmente han decidido ir a la huelga. "Se les dicen las cosas y no hacen caso", lamenta.