Seis años de prisión y una multa de más de 1,8 millones de euros. Esa es la pena que pide el fiscal para Mithat M.M., Jacobo S.G. y Daniel R.H. Los tres están acusados de un delito contra la salud pública por intentar introducir en Lanzarote 587 kilogramos de hachís, valorados en más de 900.000 euros. El juicio tendrá lugar este martes en la Audiencia Provincial de Las Palmas.
Los hechos que allí se dirimirán tuvieron lugar la mañana del 26 de julio de 2012, cuando, según recoge el escrito de acusación que el fiscal ha presentado ante la Audiencia, Mithat M.M. y Jacobo S.G. llegaron al embarcadero del muelle de la Escuela de Pesca de Arrecife en una embarcación de recreo. Allí les esperaba el propietario del barco, el tercer acusado, Daniel R.I., que se encontraba en un vehículo con el remolque para la embarcación.
A bordo de la nave se encontraron 587 kilogramos de hachís, de los que, explica el escrito, 23,55 tenían una riqueza media del 17 por ciento en THC, 504 kilogramos del 16 por ciento en THC y 59 kilogramos con una riqueza media del 15,5 por ciento.
"Total desprecio a la salud"
"La sustancia incautada estaba destinada a su posterior distribución a terceras personas en la isla de Lanzarote, con total desprecio a la salud individual y colectiva de terceros", apunta la acusación del Ministerio Fiscal. Según indica este escrito, esos casi 600 kilogramos de hachís podían alcanzar "el valor de 904.782 euros en el mercado ilícito".
Para la Fiscalía, estos hechos son constitutivos de un "delito contra la salud pública en su modalidad de sustancias que no causan grave daño a la salud". Por ello, solicita una pena de prisión de 6 años para los tres acusados y una multa de más de 1,8 millones de euros, además de tener que correr con las costas del procedimiento judicial.
De los tres acusados, dos tienen antecedentes penales. En el caso de Mithat M.M., fue condenado por conducir sin carnet a 30 días de trabajo en beneficio de la comunidad, además de haber sido privado de libertad por esta causa entre el 26 de julio de 2012 y el 20 de diciembre del mismo año. Por su parte, Jacobo S.G. fue condenado a 8 meses de prisión por un delito de resistencia y a 1 año y 6 meses por otro delito de lesiones. En ambos casos, esos antecedentes no son "computables a efectos de reincidencia", por ya haber sido condenados por ellos.