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La familia detrás del proyecto 'Diario de dos papás': "La adopción no es tan oscura como la gente cree"

A lo largo de todo el proceso y a pesar de sus ganas de formar una familia, Pablo y Jorge tenían claro que querían tener un hijo por adopción

Jorge Contreras y Pablo Delgado con sus hijos Abián y Ainara. Foto: Juan Mateos.

"Hay tantos tipos de familias, como familias hay", ese es el mantra del conejero Pablo Delgado y su marido Jorge Contreras, la pareja detrás de la cuenta de Instagram @Diariodedospapás, una iniciativa que surge de la necesidad de conquistar espacios en los que poder mostrar otras formas de vivir, distintas a lo convencional, pero igual de válidas. 

Ambos comenzaron a salir en 2013 y descubrieron que compartían el sueño de ser padres y formar una familia. A pesar de que investigaron "todas las opciones", siempre tuvieron claro que el camino que querían seguir era el de la adopción. Así fue como su primer hijo, Abián llegó a sus vidas. Tras dos años de casados, en 2017 decidieron iniciar un expediente de adopción, tenían la idea de adoptar a dos hermanos, pero recibieron una llamada que cambió su vida.

En 2019, "nos propusieron conocer el expediente de un menor, dijimos que sí y lo conocimos. Desde el minuto uno supimos que ese niño, era nuestro niño, nuestro hijo", confiesa Pablo Delgado durante una entrevista con La Voz. Para conocer a Abián tuvieron que desplazarse a Gran Canaria y realizar un proceso de "acople", un tiempo de transición en el que los padres y los menores se van conociendo hasta que finalmente se van a vivir juntos.

Antes de arrancar su proceso, Delgado revela que partían "de la idea que tiene la gente sobre la adopción" y temían que tendrían que enfrentarse a un proceso engorroso que se alargaría en el tiempo. "Estábamos un poco perdidos en el proceso porque no conocíamos a nadie que estuviera en el mismo punto que nosotros. Lo único complicado que se hace son los tiempos, porque claro, son menores y depende de los niños, de cada experiencia, de cada caso", continúa. 

"Ahora los tiempos han cambiado un poco y está un poco más establecido, pero obviamente no puedes decir, abres expediente hoy y en dos años tienes el niño o la niña, porque nunca se sabe", señala. Ahora, su perfil activista en redes sociales sirve también a muchas familias que están iniciando el proceso, como un espacio donde solventar dudas e incluso donde reencontrarse con otras familias en su situación

En redes sociales, ambos muestran imágenes de la vida cotidiana con Abián, aunque han decidido tapar la cara de Ainara porque su tutela está aún bajo el paragüas del Gobierno de Canarias. "Nos lo han preguntado muchas veces y no es que no queramos mostrar la cara de la niña y la del niño, sí. Tenemos la guarda y custodia, como en todas las adopciones es lo primero que te dan. La tutela de momento pertenece al Gobierno de Canarias, entonces nosotros no podemos publicar fotos de un niño tutelado por el Gobierno de Canarias hasta que el juez ratifique la adopción", expone. 

En relación a la sobreexposición de los menores en redes sociales, Delgado expone que han recibido "pocas opiniones negativas" sobre la publicación de imágenes de sus hijos en internet. "Hemos recibido muchísimos comentarios y mensajes de gente dándonos la enhorabuena y agradeciendo la labor que hacemos. Nosotros nos planteamos el Instagram como una herramienta que utilizamos para visibilizar las familias homoparentales, las familias diversas y no creemos que estemos explotando la imagen del niño porque son momentos cotidianos, la historia de una familia normal y no tenemos pretensión de vivir de ello". 

A lo largo de todo el proceso y a pesar de sus ganas de formar una familia, Pablo y Jorge tenían claro que no querían tener un hijo por gestación subrogada. En los últimos años ha crecido la tendencia en famosos de clase alta, como Cristiano Ronaldo o el polémico caso de Ana Obregón, que han optado por pagar a una mujer, generalmente de clase baja, para que geste durante nueve meses a sus hijos y luego quedarse con esos bebés. Delgado expone que él y su pareja no están de acuerdo, "pero bueno, ya cada uno con sus razones y su pensamiento pero nosotros no, no compartimos esto", puntualiza. 

Hace tan solo dos meses, llegó a su vida la pequeña de la casa, Ainara, una niña de cuatro años, que ha llegado para completar la familia y cumplir el sueño que tenían cuando comenzaron el proceso de adopción de Abián: tener dos hijos. 

Aún en el proceso de adaptación a su nueva vida, siendo cuatro en casa. Delgado lanza una flecha a favor de la adopción: "No es tan oscura como todo el mundo cree. Lo nuestro fue relativamente corto en tiempos de espera y la verdad, hasta la fecha, estamos supercontentos y es una forma tan válida como otra cualquiera de formar una familia". 

Si bien es cierto que no es un camino de rosas, tanto él como su marido atienden con sinceridad las preguntas que sus hijos se hacen sobre sus familias biológicas. "Tanto él como ella, cada uno adaptado a su edad, saben un poco su historia de vida, no se les oculta nada y siempre hemos estado para intentar ayudarles y explicarles lo que han vivido", indica.

Sobre las cargas emocionales que viven los pequeños tras dejar atrás a su familia biológica, Delgado añade que "obviamente cada niño tiene su mochila, porque estos niños son unos supervivientes, y es una mochila que pesa bastante. La experiencia que han vivido la tienen ahí y en algún momento pues va saliendo poco a poco y simplemente hay que estar preparados para afrontar con ellos lo que ha sido su vida".

Jorge Contreras y Pablo Delgado con sus hijos Abián y Ainara. Foto: Juan Mateos.