Un total de 95 personas migrantes se vieron obligadas a dormir en el suelo en Lanzarote ante la falta de recursos permanentes. A su llegada a Puerto Naos, los integrantes de las dos últimas embarcaciones rescatadas este pasado lunes fueron albergados en carpas a pie del puerto.
De los 98 auxiliados en las dos últimas embarcaciones precarias que arribaron a la isla en la tarde de este lunes, cifrados en un inicio en 120 personas, tres fueron trasladados al hospital por distintas patologías. El resto pasó la noche en carpas de plástico bajo la custodia de la Policía Nacional tras ser atendidos por voluntarios de Cruz Roja.
El gerente del Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote, Enrique Espinosa, asegura en declaraciones a Radio Lanzarote-Onda Cero que se hizo todo lo posible para que las personas "no durmieran al raso" y se adaptó el espacio con "todo lo necesario" para que pudieran pasar ahí la noche.
Mientras tanto, el espacio en el que debían ser atendidos, el Centro de Acogida Temporal de Extranjeros (CATE) de Arrecife estaba al límite de su capacidad. En concreto, con los rescates de seis embarcaciones precarias entre la noche del domingo y la tarde del lunes alcanzó las 270 personas. En ese momento, el Ministerio del Interior decidió reducir su capacidad para evitar riesgos y buscar una alternativa temporal.
A las 9.30 horas de la mañana de este martes las carpas continuaban albergando a personas migrantes en su interior al pie del muelle de Puerto Naos. En la puerta, agentes de la Policía Nacional custodiaban el lugar. Cabe recordar que las primeras 72 horas son afiliados y se recogen sus datos, así como se realizan las primeras entrevistas.
Además, una de las embarcaciones que fueron rescatadas en la tarde de este pasado lunes, cerca del Roque del Este, llevaba solicitando ayuda desde por la mañana. Por este motivo, presentaban más síntomas de deshidratación cuando fueron rescatados. Sin embargo, también durmieron en el puerto.
El consejero de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote, Marci Acuña, ha intervenido también ante los micrófonos radiofónicos para añadir que "se habilitaron carpas, colchonetas y baños sanitarios. Dentro de la improvisación y de la situación tan urgente se intentó que estuvieran lo mejor posible". De esta manera, el Cabildo respondió a la solicitud de colaboración de la Policía Nacional.
Sobre las llegadas entre el domingo y el lunes, Acuña explica que al centro de acogida temporal de menores migrantes de La Santa han llegado "muchas familias y muchos niños. Sobre todo en subsaharianos se da la situación de venir familias enteras, mientras que los magrebíes suelen no venir acompañados", explica.
En principio se incorporaron 18 menores no acompañados. El centro de La Santa acoge, por el momento, en torno a 60 menores. Así lo adelanta Acuña. "Nuestra capacidad es de 80, aunque puede albergar a lo mejor más, pero nuestro planteamiento es que esté en 40 y no pasar de ahí", asegura. Sobre desmontar el centro de La Santa, tal y como solicita el alcalde de Tinajo, Jesús Machín, el consejero asegura que "está en su agenda, pero una cosa es lo importante y otra lo urgente. Ahora lo urgente es atender a las personas que nos llegan un día sí y otro también que impide que ese objetivo se pueda satisfacer en un espacio corto de tiempo".
A esto hay que sumar al resto que arribaron a la costa con sus familias. En este caso son derivados al centro de Montaña Mina en Argana.