La Asociación de Madres y Padres (Ampa) de Lanzarote apoyará la huelga de deberes que se iniciará este fin de semana a nivel nacional por iniciativa de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (Ceapa). El presidente de la Ampa de la Isla, Iván Martín, explicó en Radio-Lanzarote Onda Cero que la huelga de deberes que se realizará por primera vez en España "no es una cuestión de antojo" y aclaró que esto "no significa que los profesores no marquen deberes, ya que siempre pueden mandar las tareas habituales de lunes a jueves". Incluso, añadió, "podrían marcar deberes el viernes, pero siempre que tengan días de diario para hacerlo". Por ejemplo, fijar deberes para el jueves siguiente, de manera que tienen lunes, martes y miércoles para realizarlos.
"Nosotros también lanzamos una serie de actividades a las que los padres podrían acogerse, para también complementar la educación y los valores culturales y sociales". En este caso, el presidente de la Ampa en la Isla no habla de tareas sino "de conversar en la unión familiar sobre algún tema de tolerancia, colectivos o visitar un museo", aclaró.
Tal y como se plantea ahora el sistema educativo, "tenemos casos de niños que entran en clase a las 8 de la mañana y hasta las 7 de la tarde no paran. Si a eso le suman el que traigan materia para realizar en casa pues se añade a esa falta de tiempo", sentenció.
"Estamos hablando de una costumbre que está aceptada por la mayoría de los padres y por eso se mandan las tareas a casa. Pero las relaciones y los tiempos van cambiando y, al final, hay que llevarlo a debate para consensuar sobre la materia y cantidad de los deberes", destacó. Sobre todo, "para ver qué tipo de educación queremos para nuestros hijos".
Respecto al debate que ha despertado esta iniciativa sobre si se está restando con ello la autoridad que tiene el docente, Martín lo niega absolutamente. "Esto realmente no es así, porque si los docentes colaboran un poco en esta campaña – estoy seguro de que la mayoría lo harán con agrado- no existirá conflicto alguno", declaró.
Creo que en aquellos casos en los que el 80% de la clase se queja de que tienen muchos deberes, el procedimiento "empieza por hablar con el propio docente y explicarle que estamos haciendo una campaña que tiene como objetivo "aflojar" en la actuación de mandar deberes porque, quizás, se puedan recuperar con otras actividades".
El presidente de la Ampa, cree que pese a este conflicto, no piensa que se vayan "a encontrar con un ambiente negativo porque tampoco existe una base legal donde se exija que haya que mandar deberes a casa", aseveró.
En esta misma línea, recordó que "incluso, el Tribunal Constitucional puso límite a la presión institucional sobre el tema de los deberes. Justificaba que el tiempo de fuera del horario escolar pertenece a los padres y era indisponible para la escuela".
Por otra parte, Martín ha subrayado que existen cuestiones diferentes que no se deben mezclar, como el caso de que en una clase un solo alumno se queje de sus tareas. "No debemos entrar en esa particularidad porque, en ese caso, quizás estamos hablando de que a ese niño le cuesta más", insistió.
A lo que se refiere el presidente de la Ampa es a los casos en que, por ejemplo, dos gemelos van a distinta clase y en la misma situación familiar se encuentran con que uno tiene deberes y otro no". "Entonces no estamos siendo justos ni iguales", aseguró.
"Otra cosa es que tu pidas a tu profesor o que tu profesor te diga que tu hijo necesita un refuerzo y te esté marcando unos deberes, son cuestiones diferentes, ya que es legítimo que tú le pidas deberes al profesor para tu hijo", especificó.
Sin embargo, "nosotros estamos abogando por aquellos padres que no pueden alzar la voz porque es una costumbre que manden deberes a casa, y nos encontramos con que hay muchos padres que no quieren eso para sus hijos, ya que les crea un problema constante con el niño. Porque si el niño no se sabe la lección, me crea el problema de que me tengo que gastar dinero en mandarle a una academia", argumentó.
"No estamos hablando de la costumbre en sí establecida, sino de los problemas que está ocurriendo por ello en las familias", concluyó el presidente de la Ampa.