Las jaulas marinas de Playa Quemada tienen los días contados. La empresa Dimagaza, encargada de explotar la actividad, anunció el pasado miércoles, 18 de enero, su cierre y puesta en marcha de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que generará el despido de 50 trabajadores.
El secretario general del sindicato UGT en Lanzarote, César Reyes, ha explicado en una entrevista en Radio Lanzarote-Onda Cero que en ningún momento, por parte del Gobierno de Canarias, se ha dado alternativa a los empleados afectados: "Solo se ha hablado del cierre, pero en ningún momento se ha tratado la situación laboral que se desligaría de eso".
Esto, a su juicio, representa "un fracaso más generado por intentar diversificar la economía", ya que aunque reconoce que la administración cuenta con "circunstancias favorables" para no haber renovado la licencia debido a causas técnicas, se tenía que haber dado "una alternativa laboral" reconduciendo a estas personas "a otros sectores mediante programas formativos".
Una concesión caducada y sin vistas a renovarse
Tal y como ha informado Reyes, la entidad de explotación acuícola tenía la intención de "continuar con la actividad, incrementando sus inversiones y mejorando la contratación", sin embargo, "no tienen capacidad administrativa para poder continuar".
Dimagaza operaba tratando de renovar una concesión administrativa otorgada en el año 2000 a Yaizatun por 20 años. Sin embargo, debido a su impacto medioambiental, y aunque la firma era conocedora desde hace algunos años de que esta licencia estaba caducada y no se actualizaría, "no se ha pensado en ofrecer un período de transición a trabajadores que llevan dedicándose una década a esta actividad".
Comenzado el período de negociación
En la actualidad, ha dado comienzo el período de negociación entre el sindicato, la empresa y la administración, un momento "crucial" para ver cuál será el futuro de las 50 personas afectadas, que no cuentan con la posibilidad de ser trasladadas a otras empresas del grupo, ya que solo opera con las jaulas.
Los trabajadores en situación de ERE continúan desarrollando su actividad, que no cesará hasta que se llegue a un acuerdo. Este período se podría alargar "un mes como mínimo", ha detallado el secretario.