Bajo el lema "Hazme visible. Por dignidad, nadie sin hogar", Cáritas Parroquiales de Lanzarote ha conmemorado el Día de las Personas Sin Techo, con la realización de diversas actividades de sensibilización y denuncia, para concienciar sobre la realidad de las personas sin hogar.
La Avenida de Arrecife fue el punto escogido para la instalación de una mesa informativa y el reparto de material solidario, con el que se ha querido reclamar un modelo de sociedad diferente que "haga realidad lo que hoy parece imposible: que toda persona viva con dignidad en un hogar propio y digno".
La campaña se realizó en Lanzarote el pasado jueves, en el marco del Día de las Persona sin Hogar que se celebra este 27 de noviembre y que se convoca en España desde hace 24 años impulsada por Cáritas y otras federaciones y colectivos. Así, entre viandantes, voluntarios y directivos de Cáritas Lanzarote se leyó el manifiesto correspondiente a esta campaña, cuya finalidad es generar cambios que conduzcan a salvaguardar los derechos de las personas sin hogar, respetando especialmente el derecho a una vivienda.
"No queremos una sociedad de personas sin derechos, de expulsiones, de descartes, de exclusión radical…. Frente al individualismo creciente, al anonimato en que vivimos, a la indiferencia ante la realidad del otro, desde la Campaña "Nadie Sin hogar" llamamos a ser en común: porque mis derechos son tus derechos, porque las situaciones que atentan a la dignidad de cualquier persona ponen en cuestión mi propia dignidad", señalaron.
Los representantes de la entidad solidaria expresaron su de deseo de concienciar sobre "la urgencia de garantizar el derecho al acceso a una vivienda digna y adecuada a las personas sin hogar", teniendo en cuenta que los datos sobre personas que duermen en la calle o alojamientos de emergencia continúan en aumento.
Objetivos de esta campaña
La campaña Nadie Sin Hogar se realiza a nivel europeo y busca ante todo: sensibilizar, a las administraciones, colectivos, jóvenes, adultos, en definitiva a la sociedad entera, sobre la realidad de las personas en situación de riesgo. Así se pide a las instituciones que realicen políticas sociales comprometidas que sitúen a las personas en el centro de sus iniciativas. Por otro lado, la campaña persigue denunciar y cuestionar con fuerza la percepción cada vez más común en toda la sociedad, ante la titularidad de los derechos humanos. Y se anima a la sociedad a implicarse y exigir los derechos de las personas en situación de mayor exclusión.