Dos proyectos que no terminan de cuajar. Dos iniciativas necesarias para muchos pero que, sin embargo, se han chocado con las discrepancias entre las distintas instituciones de Lanzarote. El albergue insular y la creación de un comedor social que planteó, en su día, el consejero de Asuntos Sociales del Cabildo, Joaquín Caraballo, no acaban de hacerse realidad. Ambas instalaciones, que se ubicarían en Arrecife, ya que esta localidad concentra más del 80% de las personas en situación de exclusión social, no cuentan con el visto bueno de este Ayuntamiento, que no cree necesaria esta instalación.
Caraballo ha asegurado en el programa "Buenos días Lanzarote" que, de momento, se está avanzando en la coordinación insular entre ayuntamientos, ONG y el Cabildo. Sin embargo, ha destacado el problema que se han encontrado con la negativa del Consistorio de Arrecife, desde donde, según el consejero, aseguran que tanto el albergue como los comedores sociales son "de nivel secundario".
Caraballo ha insistido en que sería "inviable" abrir esta residencia en otro lugar que no fuera Arrecife, ya que su uso resultaría mínimo. "Estas infraestructuras son responsabilidad municipal, son los ayuntamientos los que tienen que decidir si ponerlas en marcha o no", ha señalado. No obstante, ha añadido que Arrecife no tendría que asumir con los gastos de este centro.
"Queremos que haya entendimiento para abrir este albergue que es fundamental para las dificultades que están atravesando algunos lanzaroteños", ha indicado. Sin embargo, ha asegurado que la decisión de abrir el centro tiene que tomarla los Servicios Sociales de Arrecife.
Asimismo, ha asegurado que las ONG consideran necesaria la potenciación de los comedores sociales, porque se sienten desbordados ante el incremento de la demanda que están sufriendo en los últimos meses. Por el contrario, los ayuntamientos de la isla creen que no hace falta este servicio, ya que están paliando esta problemática con el reparto de alimentos. "Colaboraremos y fortaleceremos con apoyo económico a las ONG que trabajan para satisfacer las necesidades de estas personas", ha indicado.
En este sentido, ha asegurado que los consistorios están repartiendo bolsas de alimentos y vales de compras para los más desfavorecidos. Sin embargo, ha añadido que "si la necesidad se incrementa, trabajará con las ONG al margen de ayuntamientos para poner en funcionamientos estas instalaciones".
Por otra parte, ha informado de que el Cabildo trabaja ya en la puesta en marcha del piso tutelado para familias en estado de precariedad. "Correremos con todos los gastos de la infraestructura y del personal. Además pretendemos que las personas que sean derivadas allí tengan el seguimiento de ayuntamientos y ONG para que puedan abandonar la casa cuanto antes", ha afirmado.
"No aguantaremos mucho más en esta situación"
El presidente de Cáritas en Lanzarote, Antonio Juan López, ha advertido de que este colectivo no aguanta más con la situación actual, tras tener que duplicar el turno del servicio de comedor a mediodía y de atender al doble de personas. "Hay grupos de Cáritas parroquiales que ya no tienen la despensa que tenían antes, no aguantamos mucho más así si queremos dar respuesta con calidad a las personas que llegan", ha considerado.
López no entiende la postura del Ayuntamiento de Arrecife: "La concejala de Servicios Sociales, Emilia Perdomo, dice que abrir un albergue en Arrecife sería un efecto llamada, que se llenaría y habría que habilitar otro". Está, según el presidente de Cáritas, no es una política "que piense en las personas que están pasando dificultades".
"A nadie le gusta estar en un albergue, en un sitio que no es el suyo, que no es su hogar. El centro no está concebido para que las personas vivan para siempre ahí, sino que es una herramienta para que las que se han visto excluidas puedan salir del pozo", ha señalado.
Asimismo, ha recordado que en 2008 pasaron por la casa de Cáritas 70 personas y ha advertido de que, en estos momentos, calcula que en Lanzarote hay en torno a un centenar de personas viviendo en la calle."Las instituciones públicas tienen que asumir esto, es su responsabilidad dar respuesta a estas personas", ha criticado.