La activista saharaui Aminatou Haidar aseguró este sábado, a través de un comunicado leído por su abogada Inés Miranda, que no piensa abandonar la huelga de hambre que comenzó en Lanzarote hace 20 días, después de ser expulsada de El Aaiún (Sáhara Occidental) cuando trataba de volver a su casa después de una temporada en los Estados Unidos.
Haidar, en relación a los últimos acontecimientos que han tenido lugar ?tras la retirada por parte de las autoridades marroquíes del permiso de vuelo concedido al avión que debía trasladarla en la noche de este viernes hasta la antigua colonia española- dijo que "ambos gobiernos [España y Marruecos] quieren empujarla hasta la muerte", algo que de ocurrir sería responsabilidad "exclusiva y directa" del gobierno español.
La conocida como 'gandhi saharaui' lamentó que el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero sea "incapaz de resolver la situación", y se mostró molesta porque éste trate de dar salida al conflicto "ofreciéndole una vivienda", en referencia al ofrecimiento realizado por el jefe de gabinete de Asuntos Exteriores, Agustín Santos, que puso a su disposición alojamiento hasta que se aclare la situación actual.
Haidar lanzó "su último mensaje" a España, en el que le recordó que "ni la cárcel ni las torturas" han podido doblegar a la activista de 42 años, que tiene un largo historial de resistencia en la lucha por la autodeterminación del pueblo saharui. "Mis condiciones no se venden", indicó, "ya que mi única condición es volver a casa", finalizaba el comunicado leído por su abogada.
ACN