"El doctor Molina Orosa nos legó su espíritu de participación y trabajo", exponía la consejera autonómica de Sanidad, este jueves, durante el sentido acto de cambio de nombre del Hospital General de Lanzarote que ha pasado a llamarse "Hospital José Molina Orosa". Un espíritu que según Roldós "impregna hoy este Hospital así como el interés del personal por la constante renovación de conocimientos que requiere la asistencia de pacientes". En el acto, en el que se hizo entrega de una placa conmemorativa y un ramo de flores a los hijos del doctor Molina Orosa, estuvieron presentes la directora de Salud, María José Costa y el gerente del Hospital, Ramón García Cerpa, además de los representantes de las distintas instituciones de la isla para rendir homenaje a este médico lanzaroteño.
"Mi padre estaría muy agradecido de saber que este gran Hospital se va a llamar en su memoria", declaraba emocionada Lina Molina, una de las hijas del ilustre doctor quien también tenía palabras de recuerdo "para todos aquellos que ya no están entre nosotros". Con este homenaje se ha querido destacar la dimensión humana de este profesional de la medicina, un médico para el que el ejercicio de su profesión era un compromiso de entrega con los más necesitados.
Mercedes Roldós agradeció "la labor y el compromiso de cada una de las personas que han intervenido en el quehacer diario", al mismo tiempo que resaltaba "las cualidades profesionales y personales del Doctor Molina Orosa", entre las que destacaba su empeño en la creación y puesta en funcionamiento del Hospital Insular de Lanzarote y, por otro lado, su vocación de sacrificio y su compromiso generoso en el desempeño de la medicina".
Este cambio de nombre del Hospital General se ha producido tras ser aprobada una proposición no de ley por unanimidad de todos los partidos políticos en el Parlamento de Canarias el pasado mes de enero.
El doctor José Molina nació el 18 de diciembre de 1883 en Arrecife y fue precursor del Hospital Insular de Lanzarote, inaugurado en 1950, cuando después de ejercer con muy pocos medios su profesión, trabajó para concienciar a la opinión pública y a las autoridades sobre la necesidad de crear un hospital en Lanzarote ya que en aquella época sólo dos casas acogían a los enfermos de toda la isla.