El presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, ha decidido ahora iniciar un expediente para nombrar Hijo Predilecto de Lanzarote a Luis Morales, fallecido el pasado 4 de agosto. San Ginés firmó el decreto el pasado viernes, una semana después de la muerte del que fuera uno de los colaboradores más estrechos de César Manrique. Solo dos semanas antes, la Corporación insular había otorgado a Morales la Medalla de Oro del Cabildo, pese a que parte del Pleno consideraba insuficiente esta distinción.
De hecho, en la sesión en la que se aprobó otorgarle este reconocimiento, Podemos ya adelantó que pediría que se tramitara también la concesión del título de Hijo Predilecto, como había reclamado en su momento, cuando se inició el primer expediente. Y el PSOE, socio de gobierno de San Ginés, anunció que se sumaría a esta petición.
Ahora, además de abrir el trámite para reconocer como Hijo Predilecto a Luis Morales, el presidente ha hecho público un artículo de opinión en el que desmiente que le “negara” esta distinción en vida. En él, afirma que está recibiendo “acusaciones” por este tema, aunque no precisa por parte de quién. “En lugar de mostrar la satisfacción de que, por fin, se hiciera justicia a la labor de don Luis Morales con un reconocimiento oficial de la institución, han llegado a lanzar la acusación de que se le ha negado un honor mayor por esta dirección política", afirma.
Se le otorgó "la segunda distinción en importancia"
En su artículo, San Ginés explica que el consejero de Cultura, Óscar Pérez, le trasladó “hace unos meses” que Luis Morales “se encontraba en delicado estado de salud y la Corporación tenía una deuda pendiente con él al menos desde su jubilación, allá por 1997”. Y también reconoce que la propuesta del consejero llegó “a instancia del portavoz de Podemos”, Carlos Meca. Sin embargo, lo que propuso Meca fue que se le nombrara Hijo Predilecto, y lo que finalmente se tramitó fue un expediente para otorgarle la Medalla de Oro del Cabildo.
Según el presidente, tanto su partido, Coalición Canaria, como “la mayoría de miembros del Pleno de la Corporación”, compartían la “propuesta” de que “quien fuera el jefe de obras del Cabildo, las manos de nuestro más insigne artista, y a quien César Manrique declarara como su discípulo –habida cuenta de que éste había recibido a título póstumo el máximo galardón contemplado en el Reglamento de Honores y Distinciones, cual es el de Hijo Predilecto– era merecedor de la Medalla de Oro del Cabildo de Lanzarote, la segunda distinción en importancia de cuantas concede la institución”. Sin embargo, ahora ha decidido iniciar el expediente para concederle la máxima distinción, aunque no aclara los motivos que le han llevado a cambiar de criterio.
En su artículo, San Ginés sí desvela que poco antes de la muerte de Morales llegó a reunirse con su familia para “compartir la controversia”, ya que afirma que “una minoría del Pleno entendía insuficiente ese galardón” y había “amenaza de bloqueo que podría hacer peligrar el otorgamiento en vida de este merecido reconocimiento”. “Lo hice de frente, como siempre hago, porque nunca me he escondido por complicadas que sean las circunstancias, exponiendo la situación, tal cual era”, sostiene el presidente.
Afirma que le "abocan a hacer" esta "aclaración pública"
Aunque no da “detalles” de esa conversación con la familia, apelando al “respeto a ellos y al complicado momento emocional que vivían y sin duda viven” tras su fallecimiento, San Ginés asegura que “mostraron en todo momento máxima cordialidad y gratitud a pesar de la dolorosa situación”. Sin embargo, y pese a que desde ningún partido ha habido declaraciones hablando de esta polémica latente, el presidente ha decidido hacerla ahora pública, pidiendo “disculpas” a la familia “por la aclaración pública” que asegura que le “abocan a hacer” quienes, según sostiene, cuestionan que se le negara esta distinción en vida.
“Nadie ha negado honores a don Luis Morales, es justo lo contrario. Reitero que es ahora, 20 años después de su jubilación, cuando por fin se le ha otorgado lo que entonces y durante todos estos años nadie hizo. Y estoy muy orgulloso de haberlo promovido, aunque fuera tarde. Me quedo con el consuelo de que, al menos, pudo conocer la noticia en vida, a través de sus hijos que, según me cuentan, la acogió con la gratitud, la humildad y el extraordinario sentido del humor que condujeron su vida”, afirma en su artículo. Además, concluye pidiendo perdón “si no supimos reconocérselo antes o fue insuficiente” y prometiendo que “muy pronto eso también lo enmendaremos”. Así, aunque no lo apunta en el artículo remitido este lunes, hace referencia al nuevo expediente que ha decidido abrir para otorgar a quien fue “las manos de César Manrique” el título de Hijo Predilecto.