El grupo de gobierno del Cabildo espera aprobar el Plan Insular de Ordenación antes de que termine la legislatura. Para ello, prevé que la aprobación inicial se lleve a cabo a finales de este año 2017 y la aprobación provisional "a mediados de 2018". Así lo han anunciado tras la visita que el redactor del PIOT, José María Ezquiaga, ha realizado este miércoles al Cabildo, tras firmar un nuevo contrato que le permitirá continuar con la tramitación del documento, después de que caducara el anterior.
En su comparecencia ante los medios, Ezquiaga defendió que el tiempo invertido hasta ahora "no ha sido tiempo perdido", aunque no se pudo seguir avanzando "en el ámbito administrativo", tras la aprobación del avance en el año 2010. Ahora, los cambios legislativos que se han producido durante este tiempo obligan a introducir cambios en el documento.
"Estamos en el mismo modelo territorial aprobado hace seis años, que plantea crecer en tres frentes: protección ambiental, calidad de vida y economía", ha defendido el redactor del Plan. Ahora, tras reunirse con el grupo de gobierno, se abrirá un periodo de encuentros con los distintos partidos representados en el Cabildo.
San Ginés buscará un "consenso total" pero cree que "será difícil"
"Espero que cuente con el mayor consenso posible", ha señalado el presidente, Pedro San Ginés, que considera que "hay muchas diferencias escénicas, que no son reales en el fondo, sobre cuál es la concepción que tenemos las distintas fuerzas políticas". Así, ha señalado que la obligación del grupo de gobierno es "tratar de alcanzar un consenso total", aunque ha agregado que es es "algo difícil, por otra parte, y eso hemos de asumirlo".
Por su parte, el vicepresidente segundo de la Institución, Manuel Cabrera, apeló a la responsabilidad política para alcanzar los acuerdos que den paso a un documento que recoja las "necesidades de los ciudadanos de la isla".
En cuanto al contenido del Plan, San Ginés destacó que contempla "inequívocamente un menor número de plazas, tanto turísticas como residenciales" y anunció la posibilidad de "rebajar aún más los techos alojativos y el número de camas turísticas, vía compensación económica de derechos edificativos". Para ello, según apuntó el consejero de Política Territorial, Marcos Bergaz, "no se descarta la búsqueda de fuentes adicionales de financiación. Además, San Ginés señaló que "aumenta la superficie de suelo agrario y protegido", y se recoge la regulación de las zonas de acampada.
En su intervención, Marcos Bergaz insistió en la importancia de actualizar un documento que data de 1991, que plasme la realidad de una isla que ha aumentado su población de forma considerable durante los últimos 25 años. Destacó además la "conciencia territorial y medioambiental" de los ciudadanos de Lanzarote y manifestó que "si el PIOL de 1991 sirvió para no vulgarizar la isla, para convertirla en un lugar único y distinto, el texto que tenemos que alumbrar entre 2017 y 2018 debe permitir que Lanzarote continúe siendo un territorio de oportunidades".