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El presidente canario, Adán Martín, advirtió ayer de que Marruecos está en su derecho de conceder prospecciones petrolíferas en sus aguas, pero si esta autorización invade la mediana provisional con España "será una cuestión de derecho internacional".
Así lo indicó el jefe del Ejecutivo regional en respuesta a unas preguntas de los periodistas en relación con la autorización de Rabat a una empresa australiana para efectuar sondeos en busca de petróleo, y puntualizó que "una cosa son las aguas archipielágicas y otra el aprovechamiento económico donde está la mediana".
Apuntó Adán Martín que ha recibido "un recado" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para que el Ejecutivo canario trabaje con los ministerios de Asuntos Exteriores y de Industria en relación con las prospecciones petrolíferas en aguas de las islas.
Aseveró asimismo que el Gobierno canario tiene "una lealtad exquisita" hacia el Ejecutivo central y está dispuesto a mantener las reuniones que hagan falta con los distintos ministerios, porque en el campo de las relaciones internacionales "hay que tener mucho cuidado y cerrar filas".
Comentó además que el Gobierno de Canarias nunca ha efectuado una visita oficial al Sahara porque en esta región hay una situación "complicada" y un problema internacional que deben resolver las Naciones Unidas "porque nos conviene a todos los territorios del entorno".
En cuanto al anuncio del grupo Socialista en el Congreso de los Diputados de que presentará enmiendas a la iniciativa para delimitar las aguas canarias, Martín abogó por ser flexibles para conseguir resultados porque "la política es el ejercicio de conseguir acuerdos, no de imponer".
Recordó que la delimitación de las aguas ha sido siempre un asunto prioritario para la Comunidad Autónoma, especialmente por lo referente a la seguridad, el tráfico de drogas, de personas y la contaminación.
Si Azores lo ha conseguido "por qué no Canarias", se preguntó el presidente regional, quien no obstante se definió como "tenaz, pero no cabezón", y está "empeñado" en conseguir sus objetivos en cuatro años, por lo que está "acompasando los ritmos a ese tiempo".