Están hartos y cansados. Ya no saben dónde denunciar, dónde dirigirse a plantear sus quejas. Han acudido a la Dirección Insular de Educación, han presentado escritos y denuncias, pero su problema no se soluciona. Los 150 alumnos de alemán de la Escuela Oficial de Idiomas siguen sin tener profesor y de las 72 horas lectivas que deberían de haber recibido a estas alturas del curso, tan sólo han acudido a clase 20 horas.
Por ello, un grupo de alumnos decidió acudir este viernes a La Voz de Lanzarote para hacer pública su denuncia. Según relatan, el curso empezó el 13 de septiembre, el mismo día que la profesora titular de alemán presentó la baja.
Hasta noviembre, estos 150 alumnos estuvieron esperando a que se nombrara a un profesor sustituto. "Al final, nos pusieron a un profesor, pero sólo estuvo 10 días, porque la maestra titular presentó su alta", indican los alumnos. Pero lo rocambolesco viene ahora y es que esta misma profesora sólo impartió clases durante 15 días, ya que de nuevo volvió a cogerse la baja.
Así, los alumnos de alemán llevan esperando a que se nombre a un nuevo profesor desde el pasado 11 de enero, pese a que han pagado su matrícula y todas las tasas educativas. Además, no han podido presentarse a los exámenes y, por lo tanto, han perdido una convocatoria.
"La gente está agotada, está cansada"
"No nos hacen caso, hemos presentado escritos en Educación, pero no nos atienden. La gente está agotada, está cansada. Y mientras, los políticos saliendo en los medios de comunicación intentando convencer a la gente para que se forme en estos tiempos de crisis. Y nosotros, que queremos hacerlo, que queremos aprender alemán en esta isla turística, donde los idiomas son tan importantes, no podemos hacerlo por falta de profesor", denuncia una de las alumnos de alemán de la Escuela Oficial de Idiomas.
Asimismo, estos alumnos tampoco entienden por qué hay en esta Escuela otro profesor que imparte clases de alemán pero sólo cinco horas a la semana. "Queremos que nos pongan un profesor ya, porque no hay derecho", afirman indignados.