Todos los grupos de la oposición en el Cabildo han enviado un comunicado conjunto para anunciar que no asistirán a la comparecencia del senador Joel Delgado, a la que habían sido convocados este viernes en el salón de plenos, ya que afirman que contraviene el reglamento de la institución. Además, consideran que se trata de "un acto propagandístico" y de "lavado de imagen" del senador del PP, tras el escándalo en el que se vio inmerso el pasado mes de marzo y que saltó a los medios nacionales.
"Joel Delgado puede y debe dar explicaciones, no solo sobre su actividad en estos dos años en el Senado, sino también aportar información sobre asuntos polémicos como el curso de la investigación que se está realizando en la Cámara Alta acerca de su incompatibilidad para cobrar del Cabildo cuando ya era senador", señalan en la nota de prensa firmada por PSOE, Podemos, Somos Lanzarote y Ciudadanos, en referencia a la factura que Delgado cobró de la institución por organizar un show humorístico, pese a que la ley impide a diputados y senadores contratar con otra administración pública.
El senador por la isla, que tiene previsto intervenir para explicar su gestión durante los dos últimos años, ha sido acusado por la oposición en el Cabildo de querer ejecutar un "lavado de imagen" con esta "supuesta comparecencia, tras el duro varapalo mediático sufrido en el mes de marzo, cuando la prensa estatal se hizo eco de los diferentes escándalos que han salpicado la trayectoria política de Delgado". Y es que además de informaciones sobre su posible incompatibilidad, por la que terminó devolviendo el dinero que había cobrado del Cabildo, medios nacionales también se hicieron eco de las conversaciones telefónicas interceptadas en el caso Unión, en las que se le escuchaba intentando que su madre fuera contratada en el Ayuntamiento de Arrecife, pese a que el puesto requería unos conocimientos de inglés con los que no contaba.
"Lo mejor que puede hacer es cumplir su palabra y retirarse de la política"
Según los grupos de la oposición, eso fue lo que "condujo al senador a anunciar su retirada de la escena política", cuando afirmó que al terminar este mandato no volvería a presentarse a las elecciones, alegando como motivo la enfermedad de un familiar. "Lo mejor que puede hacer el senador es cumplir su palabra y retirarse definitivamente de la política cuanto antes", señalan en su comunicado, en el que afirman que "las polémicas actuaciones de Joel Delgado han contribuido a aumentar el descrédito de la política insular ante los ciudadanos de la isla".
Por eso, señalan que no van a ser "partícipes de un paripé pensado solo para blanquear la imagen del senador, en una supuesta comparecencia que no querían ni sus propios compañeros del Partido Popular en el Cabildo", que al parecer se habían opuesto a que Delgado compareciera durante el transcurso de un Pleno, como había solicitado inicialmente.
Además, apuntan que si Delgado quiere dar explicaciones debe hacerlo "en el foro adecuado, ante la ciudadanía de la isla, mediante fórmulas como la convocatoria de rueda de prensa, y no haciendo uso del salón de plenos del Cabildo, anunciando una supuesta comparecencia que contraviene el reglamento de la institución".
"Un grave precedente de uso partidista del salón de plenos"
Al respecto, los grupos de la oposición señalan que el reglamento orgánico del Cabildo "no permite que cargos públicos ajenos a la institución, y sin que se solicite formalmente, realicen comparecencias ante el Pleno". Por ello, afirman que "no se prestarán a acudir al acto organizado por Pedro San Ginés (Coalición Canaria), en el que el senador por Lanzarote, Joel Delgado (PP), pretendía dar cuenta de los dos años de su gestión en el Senado y el análisis del grado de cumplimiento del gobierno de Mariano Rajoy con Lanzarote, según la convocatoria enviada por la Presidencia a través de correo electrónico a los diferentes grupos el pasado lunes 30 de julio".
Además, insisten en que "una figura reglamentaria como es la comparecencia ante el Pleno debe ser respetada conforme a la norma" y consideran que San Ginés estaría sentando "un grave precedente de uso partidista del salón de plenos del Cabildo, según el cual se podrían improvisar comparecencias de cualquier cargo político a conveniencia de quien ostenta el poder".