La Federación Regional del Taxi de Canarias, Fedetax, a la que pertenece el colectivo de este sector en Lanzarote, ha criticado al Cabildo por contratar a una empresa externa para que gestione el Sistema de Gestión de Flotas, más conocido como Auriga. Según ha indicado a través de un comunicado, en Canarias y en toda España son los propios taxistas los que gestionan este servicio. De momento, el Cabildo ha adjudicado la administración de este sistema de forma provisional.
Fedetax ha mostrado su apoyo total a los taxistas de Lanzarote en su "lucha contra las arbitrariedades, abusos y las amenazas" que, según ha denunciado, reciben "sistemáticamente de las instituciones públicas de la isla". Según ha criticado, el Cabildo "con mala voluntad y amparado, avalado y ayudado" por los ayuntamientos, "que incluso han llegado a cambiar sus ordenanzas para dar contento a esta cacidada del Cabildo", ha adjudicado a una empresa la gestión de este servicio.
Por todo ello, ha exigido a los ayuntamientos que den marcha atrás con los acuerdos alcanzados para lo que, a su juicio, es una "imposición" del sistema Auriga. De esta manera, ha recordado que este sistema "no es un elemento obligatorio o necesario para el funcionamiento del taxi sino, por el contrario, es un elemento positivo para mejorar el servicio y que ha de ser sufragado con sus cuotas por el propio taxista".
"Incapacidad" de Ramón Bermúdez
Asimismo, ha pedido al Cabildo que tome cartas en el asunto ante la "incapacidad" del consejero, Ramón Bermúdez. En este sentido, ha exigido que se den "órdenes concretas y precisas" para anular el acuerdo de adjudicación de dicho sistema con el objetivo de empezar una nueva negociación que permita acuerdos "justos y convenientes para todos".
Desde la Federación Regional del Taxi de Canarias han ofrecido a los taxistas de la isla la conexión a cualquiera de las centrales de las que disponen el resto de las personas del sector de Canarias. Por último, este colectivo ha rechazado "cualquier intento de intromisión política" en el sector hecho que, según ha denunciado, "pretenden hacer desde las instituciones públicas. "De ninguna manera queremos ser moneda de cambio político entre unos y otros", ha subrayado.