El tercer debate de política general de esta legislatura, que constituye un auténtico examen al presidente del Gobierno, Paulino Rivero, sobre los cumplimientos de los compromisos adquiridos en su investidura, se centrará en la crisis económica y su principal consecuencia: una tasa de paro del 27 por ciento en el Archipiélago.
No obstante, el PSC también incidirá en la absoluta inoperatividad del jefe del Ejecutivo por conseguir que el gabinete aplique, con garantías, políticas en las áreas más fundamentales para los ciudadanos, como la Sanidad , la Educación y Bienestar Social.
Las medidas anticrisis, absolutamente positivas según el Gobierno y calificadas de nulas e ineficaces por la oposición, serán desgranadas por unos y otros con el fin de convertirlas en las armas arrojadizas dialécticas para culparse unos a otros de que las Islas puedan acabar 2010 con 320.000 parados.
Evidentemente, no será una sorpresa que nacionalistas y conservadores culpen al Ejecutivo central y a su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, de la grave crisis económica que padecen las Islas y que fue diagnosticada por el vicepresidente José Manuel Soria con la suficiente antelación que no practicó el Estado.
El Pacto social será usado por CC y el PP para demostrar sus desvelos a la hora de atajar las altas tasas de desempleo en las Islas, mientras que el presidente del Grupo Socialista, Manuel Marcos, incidirá en que es papel mojado al no tener una ficha financiera que lo sustente, quedándose en una cortina de humo más del marketing político de Rivero.
Tanto Rivero como los grupos que lo apoyan anunciarán el mantenimiento de las medidas ya en marcha, así como otras nuevas, para revitalizar el empleo y el consumo, como las que irán destinadas a facilitar avales a pequeñas y medianas empresas ante la incapacidad del Estado para abordar reformas estructurales en el mercado laboral. Aquí, el presidente Rivero hará valer la iniciativa de rebajar el horario laboral a cambio de horas para incentivar la formación de los trabajadores.
Pero donde el PSC va a echar toda la carne en el asador para que la opinión pública visualice la ineptitud del presidente Rivero es en todas las políticas sociales: la Ley de Dependencia, las listas de espera sanitaria y la Educación , aprovechando que hay una huelga indefinida que se iniciará en apenas 10 días en la enseñanza no universitaria.
Los recortes en los presupuestos de estas tres grandes áreas, unidos a los que deberá afrontar ahora el Ejecutivo regional de 183 millones de euros debido a los ingresos artificiales que el Ministerio de Hacienda ha detectado en las cuentas que ha elaborado el vicepresidente José Manuel Soria también serán usados por el PSC para, por una parte, destacar la ineficacia del Ejecutivo y, por otra, para evidenciar que, en contra de lo que reitera el presidente Rivero, éste no es un Ejecutivo volcado en satisfacer a los ciudadanos y que gobierna de espaldas a la gente.
Junto a estos grandes debates, tampoco faltarán referencias al caso Tebeto, al catálogo de especies protegidas y a los viajes en helicóptero de Rivero y Soria, sin olvidar de que tanto el presidente como los portavoces de CC y PP pueden referirse al Congreso del PSC para increpar a Pérez de que sus propios compañeros lo han desautorizado para representarles en el debate.
ACN Press