Así lo han acordado este lunes el Ayuntamiento de Arrecife y la Fundación César Manrique, que después de años de tensas relaciones por la polémica generada a partir de la retirada de la escultura, vuelven a acercarse prorrogando además la cesión de las instalaciones propiedad de la Fundación en La Plazuela utilizadas por el área de Cultura de la capital como oficinas y sede de la Biblioteca Municipal, mientras se restaura la casa de la cultura Agustín de la Hoz. El convenio prorroga la cesión otro año más, hasta diciembre de 2008, momento en el que el Ayuntamiento espera que hayan terminado las obras.
La polémica entre el Consistorio y la FCM vino cuando se decidió la retirada de la escultura para iniciar las obras que finalmente convertirían los bajos del parque Islas Canarias en el parking hoy en funcionamiento, al que se opuso frontalmente la Fundación, que de hecho recurrió a la Justicia y consiguió que se anulara la licencia. "Dejaron la escultura acostada en una nave del Cabildo", explica Miguel Ángel Ferrer, hasta que fue la Primera Institución la que volvió a ponerla en pie, donde todavía permanece en el barrio de Argana Alta.
Ahora el Ayuntamiento quiere recuperarla y han decidido una nueva ubicación, ya que no parece razonable reincorporarla al paisaje del parque Islas Canarias, un lugar que choca con la filosofía de la FCM. Así que, en el plazo aproximado de un mes, "Barlovento" podrá verse en la rotonda situada frente al Arrecife Gran Hotel. "Hay que buscarle una peana acorde con el tamaño y el volumen de la escultura", explica Miguel Ángel Ferrer.
César Manrique creó la obra en 1970 a partir de una parte de la estructura de un barco, motivo por el que popularmente los lanzaroteños la conocen con el nombre de "La Chatarra". Ahora, 28 años después de su creación y tras su paso por la nave de Argana Alta, la escultura se encuentra en buen estado según los técnicos que se han encargado de su revisión.