Esta medida, "de enorme trascendencia", según el consejero de Política Territorial y Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, Mario Pérez, supone pasar de 5.280 a 7.650 kilowatios de potencia, generada por los nueve molinos en funcionamiento, que se verá incrementada con la construcción de una nueva unidad cuyo proyecto ha sido ya presentado y autorizado por el Ejecutivo autonómico. De esta manera, se alcanzarían los 8.500 kilowatios de potencia.
Las repercusiones económicas son también notables, según destacan desde el Cabildo, "dado que con esta puesta en marcha definitiva se podrá cobrar la tarifa completa a las administraciones e instituciones ? en torno a siete y nueve céntimos de euros por kilowatio- y no la mitad, como venía sucediendo hasta ahora".
En palabras de Mario Pérez, "esta decisión supone un respaldo importantísimo a una apuesta clara y rotunda por el impulso definitivo de las energías renovables en Lanzarote, condición imprescindible para avanzar hacia un desarrollo sostenible y en armonía con el medio ambiente".