Reducir el número de camas para generar inversión en esta vía. Este es un planteamiento novedoso con el que se buscaría renovar la planta alojativa según indicaron los expertos que participaron en las jornadas ‘Reserva para Inversiones de Canarias: una reflexión a tiempo'.
Para ello, la posibilidad más radical es desincentivar la inversión en nuevas explotaciones, de suerte que no se consuma más territorio, y de esta forma incentivar la reforma de las existentes. Otras interpretaciones admiten un margen que implica mejora de los estándares generales. En cualquier caso, hay que aclarar cuál es la marca de Canarias y a qué estándares de calidad se refieren. Se valora la propuesta de incluir el valor del suelo, modificando la regulación actual.
El crecimiento experimentado en Lanzarote en las dos últimas décadas ha determinado la creación de un número igualmente alto de empleos, que han atraído a un flujo de personas que genera nuevas necesidades de bienes preferentes (sanidad, educación, vivienda, seguridad y administración de justicia, cultura), algunos de los cuales tienen un fuerte impacto sobre el territorio.
Los elevados niveles de dotación de la Reserva para Inversiones de Canarias (RIC) son causa y efecto de este proceso. No se quiere decir con esto que la RIC sea la única causa del crecimiento.
Numerosas variables
Por supuesto, han coincidido en el tiempo numerosas variables determinantes de esta fase de expansión en la segunda mitad de los años noventa. Desde la perspectiva de la política económica, al efecto incentivador de la RIC hay que sumarle el de los incentivos económicos en forma de subvenciones.
Los anticipos financieros de los tour operadores a las empresas turísticas derivados de la sustitución desde los complejos antiguos a los emergentes en el sur de la Isla han tenido un importante efecto. Tal valoración ha sido posible gracias a un original y completo estudio sobre las dotaciones de RIC en Lanzarote que ha sido presentado al grupo de expertos. Este estudio permite un balance de los efectos positivos y negativos de la RIC.
Entre los efectos positivos está la mayor solvencia alcanzada por las empresas y la creación de empleo. Entre los negativos, el coste medioambiental, la desigual oportunidad de las empresas para el aprovechamiento del incentivo, la evidencia de que el crecimiento económico no se ha traducido en crecimiento de la renta de los asalariados del mismo nivel, lo que ha tenido un efecto sobre la capacidad general de gasto en bienes de consumo y el ahorro de la población.
El estudio sugiere que la nueva RIC debe impulsar el proceso de cambio en las explotaciones turísticas, las acciones encaminadas a cualificar el paisaje, la creación de empresas en los que la cooperación entre los sectores públicos y privados para atender proyectos de interés público, los proyectos innovadores relacionados con la consideración de Reserva de la Biosfera.
En definitiva, se trata de proponer un avance hacia el desarrollo, más allá del crecimiento por el crecimiento, y evitar la creación masiva de empleo de baja calidad. Ciertamente este planteamiento excede de las posibilidades de la RIC, pero como instrumento poderoso que ha demostrado ser, debe orientarse para que ayude a la toma de decisiones en el sentido propuesto.
Otros aspectos
En cuanto al empleo, una perspectiva interesante es contemplar las relaciones entre innovación, gestión de los recursos humanos y empleo, desde el punto de vista de la productividad. Sobre el I+D+I destaca la necesidad de impulsar la innovación que contrasta fuertemente con la realidad de las prácticas poco tendentes a promover estos procesos.
La RIC en su actual regulación no parece ser un incentivo suficiente para cambiar esta tendencia. En parte, esto se debe a las ventajas fiscales obtenidas por la vía de la normativa general y en parte por la inseguridad jurídica que envuelve a la RIC.
Sobre el medio ambiente, se considera que este es uno de los aspectos negativos de la RIC en cuanto que impulsa el crecimiento económico y genera costes medioambientales crecientes. La referencia de la ley a proyectos que mejoren el medio ambiente como vía de materialización ha sido poco o nada explotada por las empresas.
Se constata que la preocupación por el medio ambiente no es una prioridad a la hora de tomar las decisiones empresariales, lo que contrasta vivamente con el hecho de que gran parte de nuestra economía y de los beneficios empresariales derivados de aquella son consecuencia directa de los recursos medio ambientales de las Islas.
Recursos que se utilizan pero que no tienen coste para las empresas. Es importante considerar que no se trata sólo de impulsar determinadas acciones tendentes por ejemplo al uso de energías alternativas, aunque esto es importante y por sí sólo constituye un avance, sino de valorar el medio en su conjunto.
Finalmente, tanto desde la perspectiva de los intereses de Canarias, como desde los de la Unión Europea, como desde las regiones africanas, la cooperación de las Islas con las regiones próximas de África resulta una oportunidad para el futuro.
La cooperación atiende también a la preocupación por la inmigración. La propuesta que se examina consiste en dotar un fondo de cooperación a partir de una fracción del gasto fiscal que supone la RIC. No se trata de invertir RIC en el exterior de Canarias, se trata de crear un fondo de cooperación.