Decenas son las imágenes de playas cerradas en la isla de Lanzarote durante días a lo largo del último año a causa de los vertidos de aguas residuales al mar. Punta Mujeres, Playa Chica o Playa Blanca han sido algunos de los puntos costeros que a lo largo de este año han visto ondear la bandera roja o colocar banderines para prohibir el baño hasta la espera de obtener resultados del laboratorio que volvieran a autorizar el baño. En plena crisis climática, Canarias continúa vertiendo al mar la mayor parte de las aguas residuales que producen sus 2,2 millones de residentes y sus más de 16 millones de turistas anuales. Ya en 2006, Naciones Unidas alertaba de que el 80% de la contaminación marina se producía desde la tierra hacia el mar y que si no se hacía nada por evitarlo la cifra podría aumentar afectando a los ecosistemas y a la salud de la población.
La legislación española obliga a contar con un censo de vertidos autorizados por las comunidades autónomas. Según el Censo Natural de Vertidos, actualizado en 2023, solo en Lanzarote hay 77 puntos de vertidos autorizados. De ellos, la mayoría son urbanos e industriales subterráneos. A ello, hay que sumar las aguas fecales de zonas residenciales y turísticas que se vierten al mar a través de tuberías y algunos emisarios submarinos sin tener la autorización para ello y, en muchas ocasiones, sin darle el tratamiento correspondiente.
A pesar de ello, las directivas europeas sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas establecen de forma contundente la obligación de depurar todas las aguas fecales urbanas de los países miembros. En la legislación canaria, el censo de vertidos ha ido un paso más allá y desde 1998 se han ido actualizando los derrames autorizados, pero también los no autorizados y los que están en fase de tramitación. A través de este censo y con datos de 2021, el sistema Grafcan recoge que solo entre Costa Teguise, Arrecife, Puerto del Carmen y Playa Blanca se llevan a cabo varios vertidos al mar que no están legalizados.
"¿Se está cumpliendo la ley o no se está cumpliendo la ley? Independientemente de si se cumple o no, se está metiendo en el mar agua, con un montón de compuestos orgánicos, pesticidas persistentes, antibióticos y parabenes", añade el ingeniero industrial José Luis Peraza en una entrevista con La Voz. El experto en gestión de aguas residuales y depuración natural adelanta que "el Plan Hidrológico pone el vertido al mar como última opción, pero es que la última opción la han cogido de primera".
Entre los puntos no autorizados hay más de una decena de Estaciones de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR), todas ellas dependientes de Canal Gestión. Por ejemplo, las de Jablillo y de Playa Bastián hasta el registro de hace tres años vertían el agua residual al mar en situaciones de saturación, aprovechándose de sus zonas rocosas, sin tener autorización y perjudicando a las zonas de baño de la zona. En 2021, su autorización estaba en trámite, pero aún en la actualidad no aparece en el Censo Nacional de Vertidos autorizados. Lo mismo ocurre con la EBAR de Pretratamiento, situada en Las Caletas, que sirve para tratar las aguas residuales de Costa Teguise, pero que tampoco está autorizada. Caso más grave es el de la EBAR de Las Caletas que, aún estando activa, no tenía ningún tipo de autorización para verter aguas fecales y tampoco estaba tramitándola.
Asimismo, en la capital de Lanzarote, tampoco tiene autorización la EBAR de Agramar, en Arrecife. Esta conducción originalmente se empleaba para el vertido de aguas de refrigeración de la empresa Agramar, pero en la actualidad sirve de aliviadero de emergencia de la EBAR y llega al mar muy cerca de la Playa de Las Arenas de Arrecife.
"Estos vertidos modifican el hábitat, los peces se comen estos desperdicios. A lo que hay que sumar que estos desperdicios generan un montón de algas, que acaban siendo comidas por otros peces y que producen enfermedades que no son perjudiciales para los peces, pero sí para los humanos", expone el experto en tratamiento de aguas residuales José Luis Peraza durante una entrevista con La Voz. Entre estas patologías están las enfermedades como la ciguatera, una intoxicación alimentaria causada por comer pescado contaminado con ciguatoxinas y que puede producir gastronteritis, pero también afecciones cardiovasculares y neuronales.
"La situación en cada isla es completamente distinta porque dependen de las políticas que lleva el Consorcio de Aguas en cada una de ellas, de la cantidad de población y de los habitantes que recibe", continúa el ingeniero industrial José Luis Peraza. En el caso de Lanzarote, depende de la entidad Canal Gestión Lanzarote, porque el ciclo integral del agua está privatizado. Además, Peraza indica que "hay islas en las que las aguas residuales superficiales no consiguen despegar, se quedan dando giros en la costa y no consiguen ir mal a dentro. Esto es grave para los bañistas", expone, incluso para los que se bañan con neopreno porque "luego deben desinfectarlo".
La costa de Arrecife, el punto de la isla con más vertidos
El Charco de San Ginés tiene tres estaciones de bombero de aguas residuales que vierten sin autorización en esa masa de agua de 500 metros de largo y 250 de ancho. La Ebar Alcorde y la Ebar Barquillo tienen conducciones por la que salen las aguas residuales al charco a través del muro de piedra que lo delimita. En esta zona también se localiza la Ebar Puntilla.
La costa de Arrecife es el punto de la isla que más conductos de vertidos de aguas residuales al mar tiene registrados. En concreto, tres de ellos se dan cerca de la playa de El Reducto. La Ebar Casino, localizada en el Club Náutico de Arrecife y gestionada por Canal Gestión, vierte el agua a través de un muro de contención situado junto a la rampa de desembarque del club; la Ebar Portugal y Las Buganvillas vierte el agua en el paseo marítimo de la Avenida Fred Olsen próximo a la sede del Cabildo y el aliviadero del Cabildo también vierte por esta zona.
Asimismo, tampoco están autorizados los vertidos de la Estación de Bombeo de Agua Residual de El Cable, que no se realiza directamente al mar, ni ninguna de las tres estaciones que operan en la localidad vecina de Playa Honda, ya en el municipio de San Bartolomé. En el caso de Playa Honda, los vertidos se realizan desde la avenida y se ha instalado "un cesto metálico".
Las afecciones medioambientales y de salud no se dan solo desde los puntos no autorizados, sino también de los que están legalizados. Por ejemplo, Puerto del Carmen sí tiene autorizado su emisario submarino, desde el que se vierten aguas fecales sin depurar, aguas a medio tratar y depuradas, según el propio censo. Este emisario está alejado de la costa, pero afecta a una zona de baño. En la localidad turística de Tías, la Ebar Kontiki, pendiente de autorizar, vierte aguas residuales en el mismo punto que la red de pluviales y desembocan en la playa de Los Fariones. Ambas están localizadas en la Zona de Especial Conservación de Cagafrecho.
Mientras tanto, las Ebar El Muellito y Varadero desembocan cerca de Playa Chica y son dos puntos de vertidos sin autorizar. En el caso de El Muellito es una zona de pesca marítima de recreo submarina y Canal Gestión informó en 2021 de que no se producen habitualmente vertidos en esta Ebar.
Para concluir, Yaiza tiene un emisario submarino no autorizado en la Costa de Papagayo, desde el que desembocan las aguas residuales de dos estaciones depuradoras y de una estación de bombeo. En 2015, de media anual vertía un total de 68,5 metros cúbicos por hora de aguas residuales. Sin embargo, Canal Gestión no conocía entonces en qué punto exacto desembocaba.
Vertidos autorizados, a fecha de 2023
En el caso de La Graciosa, el Censo Nacional de Vertidos no contempla ningún vertido autorizado de aguas fecales al mar, con cifras actualizadas de 2023. Mientras que en Lanzarote los vertidos autorizados se clasifican en: industriales o urbanos; y subterráneo o superficial.
En la isla existen varios puntos de vertidos urbanos subterráneos autorizados distribuidos por pueblos como Órzola, Caleta de Famara, Arrieta, Guatiza o Charco del Palo, pero también espacios de interés social como la Unidad de Rehabilitación Psicosocial o la base militar de Peñas del Chache y también cultural, como el Mirador del Río o la Cueva de Los Verdes. Asimismo, el Censo Nacional de Vertidos recoge la autorización de un punto en el Monumento Natural Montañas del Fuego, correspondiente al Centro de Arte, Cultura y Turismo localizado en la zona, así como otros dos puntos cercanos. A ello se suman ocho puntos autorizados en el Paisaje Protegido de La Geria.
Espacios como el Monumento al Campesino cuentan con dos puntos de vertidos autorizados, uno de aguas industriales superficiales y otro de aguas urbanas subterráneas.
Los vertidos de hoteles y zonas industriales
En Costa Teguise existen seis puntos de vertidos industriales subterráneos autorizados, todos ellos vinculados a hoteles y apartamentos turísticos. Lo mismo ocurre con Puerto del Carmen, donde hay una docena de puntos de vertidos industriales de aguas subterráneas procedentes de la actividad hotelera y de la hostelería, así como cinco puntos autorizados en un zoológico. En Costa Calero, hay cuatro espacios más en los que están autorizados los vertidos al mar.
En el caso de Playa Blanca, existen tres puntos autorizados cerca de Puerto de Marina Rubicón, así como otros vertidos urbanos subterráneos autorizados relacionados con dos hoteles de la zona y un vertido industrial superficial.
A ello se suma, que en la zona industrial de Arrecife y la central térmica de Las Caletas (Teguise) existen tres espacios de vertidos superficiales autorizados. En concreto, dos de ellos procedentes de la Central Términa de Punta Grande y un tercero de la zona industrial de la capital de Lanzarote. También otros puntos de vertidos relacionados con servicios sanitarios como Hospiten Lanzarote.
"Esto es un problema que las autoridades de nuestro gobierno tienen que resolver y por lo menos evitar cualquier vertido al mar, por ley debería estar prohibido. Peraza plantea la opción de apostar por la reutilización de las aguas residuales, pero también por la creación de depuradoras naturales adecuadas para cada lugar. "Podemos hacerlo porque vamos a consumo cero y según el clima y la zona se puede escoger una opción o otra", continúa, "las plantas depuradoras naturales no dependen de tecnologías de exteriores que son muy caras, no contaminamos al mar y son agujeros de consumo de CO2, además de una fuente de oxígeno. Más bonito no se puede pintar", añade.
A pesar de que en la actualidad no hay depuradoras naturales en La Graciosa ni en Lanzarote, el ingeniero expone que la octava isla debería tener una desaladora natural. "Es un sitio emblemático y las depuradoras naturales están hechas en los espacios con las máximas protecciones que hay y no tienen ningún vertido al mar".