Tras dos años de suspensión por la pandemia, los fieles volvieron a la ermita de Los Dolores a cumplir con la promesa a la Virgen para darle gracias por haber parado el volcán en 1.824.
A las 18.00 horas en el exterior del Santuario se celebró la Eucaristía presidida por el párroco titular de Tinajo y San Bartolomé, Francisco García. Una vez finalizada la Eucaristía se cantó el himno y acto seguido la imagen de Nuestra Señora de los Dolores acompañada de los devotos recorrieron en procesión los alrededores del Santuario. Al llegar al pórtico la imagen fue despedida con sonoros aplausos.
El 31 de julio de 1824 entró en erupción el volcán de la Capellanía de Clérico Duarte aterrorizando a los vecinos de los pueblos de Tiagua y Tao que veían cómo la lava volvía a correr sepultando los fértiles campos y poniendo en peligro también sus casas.