He tratado con multitud de personas, he transitado entre ideologías y creencias diversas. he conocido otras culturas, he sentido lo que los demás sienten, me he acercado al corazón de mis semejantes y he descubierto que.
cada alma es responsable de sus actos. cada persona -dejando a un lado sus creencias e ideologías- es libre en mayor o menor medida -consciente o inconscientemente- de todo aquello que piensa y lleva a cabo.
He llegado a la convicción que me impulsa a creer en cada uno de mis semejantes como individuos. lo que hacen, lo que aportan para bien o para mal. se convierte en si mismos, en su entorno y en el conjunto de la humanidad.
Las creencias e ideologías pueden llegar a forjar santos o demonios. almas nobles o pendencieras.
He cabalgado a lomos de la comprensión y de la injusticia. he convivido y trabajado con multitud de personas de diversas condiciones sociales y económicas.he aunado esfuerzos y proyectos que dependían de un engranaje
formado por un equipo. para descubrir que todos somos UNO. y al mismo tiempo muchos. cada cual con sus circunstancias. con su vida y su destino.
Todos ansiando encontrarle ese sentido a la vida. y sin embargo. muchos perdidos e individuales. alejados del bien común. de lo que nos vincula estrechamente, de lo que da sentido a este presente continuo en el que todo sucede a un tiempo. en el que todos los caminos son posibles, en el que despertar significa solidarizarse con el bien común, con la paz. con el amor, con el equilibrio y la armonía que ha de unir y limar esas asperezas y rencillas que. tan solo nos distancian y nos enfrentan.
Tomás Morilla Massieu
Tafira Alta (Gran Canaria)