Arrecife, la ciudad más de moda de Canarias, y no es por haberse asentado definitivamente como la tercera capital de Canarias, ni por ser la envidia en gestión institucional.
El discurso de Arrecife tóxico y negativo está en cada uno de los 17 barrios que componen esta maravilla de ciudad. Y es cierto, lo es, Arrecife jamás ha estado como se encuentra en este momento; con deficiencias claras en gestión y liderazgo.
Eso ha producido que los vecinos más necesitados estén malviviendo sin las Ayudas de Emergencia Social, que los clubes hayan sufrido un retraso de más de seis meses en el cobro de las subvenciones deportivas, que la ciudadanía en general tenga que tragar con una Avenida cerrada de manera dictatorial, a pesar de que su apertura ha sido aprobada tres veces en pleno?
Con los comercios viéndose obligados a abandonar nuestra ciudad y yéndose a municipios vecinos; con la "cultura con el telón bajado", con los jóvenes sin alternativas de ocio ni educacionales?.
NO, me niego, Arrecife no es esto, Arrecife es una ciudad con un potencial enorme para ser referencia en Canarias, en el mundo.
La contextualización es fácil, casi todo es negativo, un bucle de tozudez mezclado con incapacidad en la gestión, pero el remedio es otro. Ganas, esfuerzos y fuerza, empuje, capacidad, ilusión, y trabajo, mucho trabajo, conceptos positivos para reeducar y crear una Arrecife verde, porque el verde es esperanza.
"La ilusión nunca se pierde". Quizás sea joven e ingenuo, o quizás simplemente la edad no tenga nada que ver en esto de la política; pero estoy convencido de que no se trata de una cuestión ideológica, se trata de sentirse arrecifeño, de que te duela ver tu barrio en condiciones precarias. Y, ante eso, todos debemos tener altura de miras. Tendernos la mano, buscar consensos mayoritarios y coherentes, dejar la política de los políticos de lado y centrarnos en la política de los vecinos, ésa que no entiende sino de "escucha qué necesitamos, e intenta darle la solución".
Y Arrecife necesita de ese trabajo, de esa positividad, de ese verde esperanza que les demuestre a todos, que nos demuestre a los que estamos inmersos en este mundo de la política y los políticos, que tenemos que poner más de nosotros mismos. Sobre todo en el diálogo, en la flexibilidad de nuestras posiciones primarias, en las cosas que nos unen y no nos separan.
Ayudémonos y ayudaremos a Arrecife.
David Toledo Niz, Secretario general de los Jóvenes Nacionalistas de Canarias