Algunas veces resulta complicado analizar la actualidad informativa de Lanzarote. Aunque estamos un poco cansados, hoy nos toca explicar una vez más nuestra visión sobre el conflicto del aeropuerto, no sobre el conflicto general, ...
Algunas veces resulta complicado analizar la actualidad informativa de Lanzarote. Aunque estamos un poco cansados, hoy nos toca explicar una vez más nuestra visión sobre el conflicto del aeropuerto, no sobre el conflicto general, porque ése requeriría de varias ediciones de LA VOZ, sino sobre el conflicto particular de las maletas.
En la jornada de ayer recibimos numerosos correos de ciudadanos de la Península que alarmados nos pedían más información sobre lo que está sucediendo en Guacimeta. La gente, como es lógico, quería saber, y si en Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) no se lo creen les podemos hacer llegar el rosario de preguntas de nuestros lectores de la edición digital, cómo les puede afectar el conflicto de las maletas. Aunque procuramos contestar a todos los que escribieron, la respuesta no era fácil: "si ustedes no viajan con Iberia no tienen por qué tener problema", es el corto mensaje que trasladamos.
Y es que tenemos muy claro que la palabra clave en este lío no es otra que "Iberia". Ha sido la antigua compañía pública, esa que siempre ha vilipendiado a Lanzarote regateándonos todos los servicios que tan necesarios nos eran antes de la llegada de la competencia, la que con su injustificada ausencia del encuentro convocado la semana pasada ha generado que se radicalizara el conflicto y que incluso terminara con los trabajadores en los tribunales de justicia. Ha sido y sigue siendo Iberia la única responsable de que todavía no se haya resuelto nada y de que Lanzarote haya dado una imagen lamentable en el exterior cuyas consecuencias a largo plazo de momento no podemos prever ni evaluar.
Si la semana pasada fue este diario el que adelantó que los directivos de Iberia no se iban a presentar al encuentro convocado en el Cabildo, en esta ocasión podemos confirmar que sí que van a venir. ¿Han recobrado el sentido común? Pues más bien no. Lo único que ha sucedido es que la noticia de las miles de maletas botadas en el aeropuerto de Lanzarote ha llegado a todo el país. Parece increíble, pero sólo cuando el asunto ha trascendido más allá de nuestras pequeñas fronteras es cuando los directivos de Iberia se han decidido a reaccionar. La excusa oficial es que ahora sí les ha llegado la convocatoria por escrito, insulso argumento que a nosotros por lo menos no nos sirve para dar algo de razón a lo que han hecho hasta ahora.
Por cierto, y para mirar el único lado positivo que vemos al conflicto del aeropuerto, que algunas tiendas están haciendo su particular agosto, de lo cual nos alegramos. Se han disparado las ventas de los turistas que se han quedado sin ropa y sin otros objetos de primera necesidad. Esperamos que cuando le pasen la cuenta a Iberia de todos los gastos algún avezado directivo se lleve las manos a la cabeza.