Esta campaña electoral, corta pero intensa, sólo puede acabar bien si la población sale el domingo de sus casas y acude en masa a votar. Digo esto porque ejercer el derecho al voto y hacerlo con una alta participación es lo que da sentido pleno y auténtico a la democracia. Sólo así, los representantes públicos en el Congreso de los Diputados y en el Senado sentiremos el respaldo de la gente ante la enorme pero hermosa responsabilidad que supone servir al interés general.
A lo largo de estos días, hemos hecho el esfuerzo de poner en el centro del debate los problemas reales de las personas, aquellos a los que la actividad política está llamada a resolver: empleo, salarios dignos, vivienda, sanidad, educación, pensiones, dependencia, oportunidades para los jóvenes? No podemos dar ni un paso atrás en libertades y debemos volver a fijar nuestra atención en la igualdad real entre mujeres y hombres, en cero tolerancia con la violencia machista, en más justicia social, en seguir luchando contra el cambio climático.
Tengo la confianza de que tanto mi compañera Ariagona González como yo mismo obtendremos la confianza mayoritaria de la ciudadanía de Lanzarote y La Graciosa para ayudar a conformar un Gobierno fuerte y de amplia mayoría en torno a Pedro Sánchez. Sólo si lo conseguimos, las y los socialistas podremos contribuir al progreso y la modernización de España, creando condiciones para que todas las personas puedan desarrollar sus proyectos de vida con empleos dignos y bien remunerados, y acogiéndose a servicios públicos universales y de calidad.
Así que ahora toca votar. Porque, como señalé hace unos días, la solución a los problemas de Lanzarote, La Graciosa y España no pasa por darle la espalda a la democracia, sino porque desempeñemos un activo papel como ciudadanos comprometidos con un presente y un futuro mejor para nuestra familia y nuestros conciudadanos. Por eso, reitero que no podemos darle ni un soplo de aire al hastío que conduce a la abstención y, al contrario, reivindico superar la tentación de quedarnos en casa el domingo. No pretendo sembrar miedo, pero si los progresistas se quedan en su casas, las derechas tendrán más opciones.
Las y los socialistas acudiremos a las urnas este domingo para alejar la posibilidad de que las tres derechas repitan los pactos que han formado en Andalucía y Madrid y que harán peligrar las libertades y los derechos sociales que sustentan el estado del bienestar. Insisto: no hay tiempo que perder, hay que seguir avanzando. No hay tiempo para la apatía porque ahora toca más responsabilidad y más sentido de Estado. No puede haber lugar para el desencanto y la desilusión entre nosotros ahora.
Salgamos de nuevo el domingo a transformar este país en la España que nos merecemos. Así que, ahora, a votar para no dar ni un paso atrás en derechos y libertades. Para construir un país así, aspiro ser senador de Lanzarote y La Graciosa. #AhoraEspaña
Manuel Fajardo Palarea, candidato del PSOE al Senado por Lanzarote y La Graciosa.