- ¿Podemos calificar este como el peor momento por el que pasa su equipo desde que usted llegó al banquillo?
- Sí, lo es porque sumamos 14 goles en contra en sólo tres partidos y porque hemos sufrido dos derrotas dolorosas en las últimas semanas ante buenos equipos. No me preocupa tanto el acierto de los demás, sino la posibilidad de que los chicos no vayan a tener la confianza de seguir para arriba. Sin embargo, confío en la tarea de los veteranos y cuando uno de ellos falta se nota en el terreno de juego. También te digo que dolió bastante la última derrota ante el Cartagena porque fue en casa, y nadie quiere perder en su campo.
- ¿Se arrepiente de haber increpado al informador de árbitros al final de aquel choque?
- Hombre, en frío me arrepentí un poco? Aquello fue en caliente; pero teníamos la razón; no era una queja gratuita. A nosotros nos ganaron 6-0 en Madrid y no hay nada que decir del árbitro, pero ante el Cartagena ya mosqueó el cambio de designación del trío arbitral poco antes del partido, y encima comete errores de libro que en un colegiado de Segunda B resultan incomprensibles. Nosotros tenemos un equipo de Primera Regional, pero aquel árbitro era para estar Preferente. Con todo, tenemos que tirar para arriba sin pensar en los árbitros.
- ¿Las derrotas llegaron por el empaque de los rivales o por relajación en los suyos?
- No, las derrotas ante equipos de esta talla entraban dentro de las previsiones que manejamos durante el mes de febrero, con un calendario duro. Lo que molesta es lo abultado de los tanteos. No creo que sea por relajación de los jugadores porque tenemos los pies en el suelo: es un equipo confeccionado con futbolistas en su mayoría procedentes de Primera Regional, está claro. Pero tenemos cuatro veteranos, sobre todo en el caso de Vladi, que son capaces de meter ritmo al partido cuando es preciso. Y el otro domingo ante el Cartagena se notó la ausencia. Resulta más normal encadenar derrotas con una plantilla novata. Por eso huyo del halago excesivo a mis jugadores, no vaya a ser que los chicos se suban mucho.
- ¿Por dónde flojea entonces el equipo?
- No me atrevo a determinar una línea porque creo que la UD Lanzarote es un equipo ordenado y compensado. Pero está claro que hemos cometido errores defensivos que, sobre todo ante rivales de calidad, nos cuestan muy caros. Pero ese es el precio que tenemos que pagar al principio por la juventud que tenemos en el equipo; y porque la apuesta es arriesgada. Ya me gustaría enfrentarme yo con la Unión Deportiva ante un Cartagena que estuviera integrado sólo por jugadores de la ciudad murciana. No es fácil lo que hacemos y sólo nos queda seguir aprendiendo de los errores, aunque sabemos que seguirán habiendo dolorosas derrotas por el camino antes de lograr la permanencia.
- ¿Llega o no llega un delantero a la primera plantilla para cubrir la ficha de Eliot?
- No me preocupo por los jugadores que no están en mi equipo, así que sólo pienso en hacer competitivo al conjunto con los jugadores que tenemos. Soy consciente de que no es sencillo la llegada de un buen delantero que marque la diferencia.
Profeta en su tierra
- Vertebra usted junto a Adolfo Pérez y Juan Antonio Machín el reducido grupo de entrenadores lanzaroteños que han dirigido al equipo en Segunda B. ¿Cómo le tratan en su casa?
- Pues tengo que decir que desde el principio he tenido muchos apoyos, tanto de aficionados como de hombres y mujeres del deporte. Pero no sólo yo, la afición se está mostrando incondicional y generosa con todos nosotros. No es normal ir perdiendo en casa 1-4 y ver cómo la gente de la grada sigue estando ahí. Me sorprendió gratamente el apoyo; así que no tenemos otra opción de seguir jodidos partido tras partido para intentar devolver a los aficionados esa confianza que están depositando en nosotros.
- ¿El sueño de la permanencia, está cada vez más cerca o se le escapa?
- Está más cerca porque cada vez quedan menos partidos y seguimos fuera del descenso. Queda mucho trabajo por delante pero sería algo muy bonito conseguir la permanencia. Para nosotros sería como obtener un ascenso porque los sacrificios están siendo altos.
- Hablando de ascensos, ¿usted también tuvo que adaptarse a la división de bronce?
- La Segunda B te da más experiencia; intento aprender de todo y compartir decisiones en la dirección para que las cosas marchen bien en el equipo. Lo hice como jugador y ahora lo hago como entrenador de la UD Lanzarote. Pedro (entrenador de porteros) y José Labrador (segundo), que también tienen experiencia con la base, me ayudan mucho a la hora de intentar adaptar a los jóvenes jugadores del conjunto a una división que les quedaba muy lejana hace unas semanas. Y seguimos trabajando para obtener el mayor rendimiento de esta plantilla.
- Por último, dígame, ¿cómo le trata la prensa deportiva?
- La prensa se porta bien con nosotros. Sólo suelo incidir en que tengan muy en cuenta las características de los jugadores que tenemos en la plantilla, chavales de reciente militancia en categoría regional que ni por alimentación, ni por dedicación, ni por intensidad, ni por medios materiales los podemos equiparar a otros futbolistas de la división donde compiten. Eso sí, tienen el claro objetivo de rentabilizar sus capacidades y exhiben un compromiso que a mí me vale. Al final, si las cosas no marchan será culpa mía, pero intento que no haya ni palos ni flores para los míos.
Miguel podría dejar la portería
La llegada del Universidad de Las Palmas a la Ciudad Deportiva (domingo 22. 13:00h) se produce quizá en el peor momento de su historia en la división, y no sólo por la situación que ocupa la escuadra grancanaria en la tabla, sino también por su inoperancia ofensiva en los últimos partidos y la circunstancia de la reciente renuncia presentada por el entrenador Benito Morales, después de 11 jornadas al frente de la dirección técnica. Este domingo ocupará el banquillo en Lanzarote Ramón López, secretario técnico de la institución colegial.
Para Carmelo Hernández el cambio de entrenador es una mala noticia para su equipo: "Nos perjudicará porque los futbolistas estarán aún más motivados para entrar en los planes del nuevo técnico", y continúa: "No me fío de su situación en la tabla porque las cosas no le están saliendo como esperaban, pero tiene a grandes jugadores en sus filas y están luchando como nosotros, por dejar los puestos bajos". En cuanto a la introducción de posibles cambios en la UD Lanzarote después de las derrotas encajadas en las últimas jornadas, el técnico se muestra cauto cuando se le pregunta por el meta Miguel: "Estamos pensando en un posible variación en la portería. Es verdad que son muchos goles, pero no han sido fallos garrafales del portero. Hemos jugado ante buenos equipos como el Lorquí, el filial del Atlético de Madrid o el Cartagena? En fin, la decisión no está tomada", concluye. Quién seguro no estará en la convocatoria será el sancionado Fran Barrios.