La alarma se desató sobre las 2 de la tarde de este martes, cuando los operarios de la empresa Kalise avisaron a los efectivos de emergencia de un incendio en uno de los camiones que utilizan para el reparto de los productos. Aunque los trabajadores de Kalise intentaron sofocar las llamas con los extintores, el fuego se propagó al resto de vehículos que estaban alrededor.
La columna de humo negro se podía observar desde varios kilómetros alrededor. Los efectivos de emergencia temían porque el depósito de combustible de los vehículos explotara, aunque al final, lo único que se reventó fueron los neumáticos de los camiones.
Los bombero que se desplazaron hasta el lugar tuvieron que parar de sofocar las llamas durante unos instantes, ya que la unidad destinada a este servicio se quedó sin agua y tuvo que esperar a que se presenciara hasta el lugar de los hechos otra dotación de emergencia, con la que finalmente se consiguió controlar el incendio.