La Guardia Civil detuvo el pasado 30 de junio a A.R.R., de 30 años de edad y nacionalidad española, cuando supuestamente intentaba forzar la caja fuerte de uno de los apartamentos de un complejo hotelero, en la localidad de Tías. En colaboración con los agentes de Yaiza, la Guardia Civil descubrió después que el arrestado era también el presunto autor de otro robo con fuerza en el municipio sureño.
En este momento, el arrestado fue sorprendido por los inquilinos del apartamento, produciéndose un forcejeo entre ellos. Los inquilinos lograron retenerlo hasta la llegada de la Guardia Civil momentos después, puesto que había sido alertada "de inmediato". La Benemérita ha informado, además, de que en ese forcejeo los inquilinos resultaron "heridos de diversa consideración".
Los agentes arrestaron inmediatamente a A.R.R. por ser el presunto autor de un delito de robo con violencia y prestaron asistencia a las víctimas, que fueron trasladadas a un centro médico de la localidad para que les valoraran las heridas. Más tarde, acudieron a las dependencias policiales para interponer la denuncia correspondiente.
Principio de Colaboración y coordinación entre unidades
En este caso colaboraron los agentes de los puestos de Yaiza y Tías. Los guardias del municipio sureño reconocieron a A.R.R. como supuesto autor de otro delito, en relación con una investigación abierta por "un delito de robo con fuerza en las cosas" que había tenido lugar el pasado 26 de mayo, en un complejo hotelero del citado municipio.
La investigación comenzó a raíz de la denuncia interpuesta por una persona que comunicó a la Guardia Civil que le habían sustraído, "forzando la caja fuerte de la habitación de un complejo, diversas joyas y objetos personales que superaban el valor de 3.500 euros, destacando piezas como un anillo de oro y diamante, y una alianza de zafiro y de diamantes", señala la Benemérita.
La Guardia Civil realizó las correspondientes pesquisas policiales en diferentes centros de compra-venta de oro y logró localizando parte de las joyas sustraídas. Además, se identificó al detenido como la persona que las vendió.
De este modo, A.R.R. fue imputado durante la detención como presunto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas, pudiéndose recuperar gran parte de las joyas.