El conductor que se empotró contra la cafetería del Hotel Diamar de Arrecife en la madrugada del sábado dio negativo en la prueba de alcoholemia. Y es que, arrojó una tasa de 0,18 miligramos por litro de aire espirado, no superando así la tasa de alcohol permitida, que es de 0,25.
Según fuentes cercanas a la investigación, el conductor de vehículo, que era de alquiler, achacó el accidente a un despiste. En concreto, declaró que su pareja le había enseñado un mensaje en el móvil y que como consecuencia de ello perdió de vista la calzada, llevándose por delante la barandilla y las mesas de la cafetería.
En cuanto a su pareja, abandonó el lugar del accidente alegando que se encontraba mal, de forma que cuando llegó la Policía ya no estaba en la zona.