Un conductor dio positivo en alcoholemia tras atropellar a dos personas en la LZ-2 en la madrugada del sábado, una de las cuales resultó herida de gravedad.
Según han confirmado desde la Guardia Civil, los hechos tuvieron lugar poco después de las 06:00 horas a la altura de Playa Honda, después de que una mujer parase su vehículo en el arcen al estar averiado. Tras ello, el hombre, que es su pareja y circulaba en otro vehículo, paró a ayudarla, y un tercer coche golpeó a ambos vehículos.
"Mi cuñada estaba en medio de los dos coches y al dar al vehícuo la aplastó contra los dos coches. Y mi hermano justo se había subido al coche de ella y quedó atrapado. Se logró zafar pero al salir se desmayó", ha relatado a La Voz una familiar de las víctimas.
La mujer resultó herida de gravedad y, según su cuñada, horas después de ingresar en el Hospital Molina Orosa fue evacuada en helicóptero al Hospital Doctor Negrín de Las Palmas de Gran Canaria, donde fue operada de urgencia de la pelvis y de una rodilla, estando pendientes más operaciones. En cuanto al hombre, fue trasladado al Hospital Molina Orosa con heridas leves y ya está en casa aunque "lleno de hematomas". "Él gracias a Dios son más bien contusiones", apunta su hermana.
Con respecto al conductor que les golpeó, desde la Guardia Civil han confirmado que dio positivo en alcoholemia, en una tasa superior a 0,60, cuando lo máximo permitido por la ley es de 0,25 miligramos por litro en aire espirado. Así, ha sido investigado por un delito contra la seguridad vial.
Según han explicado desde la Benemérita, el Código Penal establece penas de cárcel de tres a seis meses de prisión para quienes conduzcan con una tasa de alcohol superior a 0,60 miligramos por litro, multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 30 a 90 días, así como la privación del derecho a conducir por tiempo superior a uno y hasta cuatro años, aunque en este caso se deberá tener en cuenta como agravante las lesiones causadas a las víctimas.