Los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil han vuelto a Lanzarote para sumergirse en busca del cuerpo del joven que cayó al mar en la costa de La Santa hace tres semanas. La búsqueda del joven se suspendió cuatro días después de que éste desapareciese, sin que los buceadores llegasen a sumergirse. Las malas condiciones meteorológicas impidieron la inmersión, por lo que este martes regresaron a la isla para intentarlo de nuevo.
Según ha confirmado la Guardia Civil, las condiciones martítimas que había este martes no permitieron al equipo de buceadores realizar la inmersión con su técnica habitual. En su lugar, utilizaron la denominada técnica del "buceador remolcado", que consiste en que el buzo se sumerja con una cuerda sujeta a su cintura. El otro extremo de la cuerda va fijado a la embarcación que remolca al buceador, garantizando así su seguridad.Los buzos del GEAS analizarán este miércoles nuevamente las condiciones del mar, con la esperanza de poder sumergirse ya sin necesidad de remolque.
El joven, de 19 años, fue arrastrado mar adentro por una ola en una zona rocosa de la costa de La Santa el pasado 19 de febrero, cuando el temporal marítimo golpeaba con fuerza. Durante cuatro días, la embarcación de Salvamento Marítimo, la patrullera de la Guardia Civil, el helicóptero del GES y efectivos del Consorcio de Emergencias de Lanzarote y de las policías locales y protección civil de Tinajo, Yaiza y La Oliva (Fuerteventura) rastrearon la costa en busca de su cuerpo. También los buzos se desplazaron a la isla, aunque en aquella ocasión no pudieron sumergirse. Los bomberos del Consorcio de Emergencias han realizado además batidas por tierra, peinando la zona en busca del joven. Su cuerpo, sin embargo, continúa sin aparecer.