La posibilidad de utilizar energías renovables en Lanzarote parece lejana. Los datos del Instituto Canario de Estadística (Istac) muestran que en el período comprendido entre 1998 y 2002 sólo el 2,78% de la energía generada en la Isla procedía de fuentes eólicas. Esto supone que durante esos años la media de producción bruta fue de 591.537 megawatios a la hora, mientras que la energía eólica bruta sólo llegó a los 16.452,01 megawatios por hora. Es más, la potencia instalada durante estos años para producir electricidad a través de esta fuente alternativa se mantuvo a lo largo de esos cinco años en 6.405 kilowatios hora.
Para estos niveles de producción Lanzarote cuenta con dos parques eólicos. En el municipio de San Bartolomé se encuentra Montaña Mina que, según los datos ofrecidos por el Cabildo de 2001, produjo 4.131,25 kilowatios. Esta instalación es de propiedad privada. Por otro lado se encuentra el parque Los Valles en Teguise y cuya producción en el mismo año fue de 12.083,221 kilowatis. En este caso sus propietarios son Inalsa con un 60% y Unelco Endesa que tiene el resto. Este último tiene que renovarse aunque, según explicó la consejera del Industria del Cabildo, Lourdes Bernal, el coste para emprender este proyecto "es tan caro como ponerlo nuevo". No obstante, la producción de energía eólica en la Isla podrá mejorar una vez que se adjudique el concurso eólico promovido por el Gobierno de Canarias para todo el Archipiélago. De hecho, ya se deberían conocer qué empresas serán las encargadas de poner en marcha estas instalaciones. Sin embargo, desde la Consejería de Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías del Ejecutivo autonómico se argumenta que el proceso es complejo debido al gran número de expedientes presentados. Las fuentes consultadas apuntaron que el número de solicitudes fue de 470 lo que supondría aumentar 2.000 megawatios si se autorizaran todas ellas. Pero la orden por la que se asignó este concurso sólo permite añadir 344 megawatios de los que 32 serán para Lanzarote.
Nuevos objetivos
Ahora tanto las autoridades como las empresas se enfrentan a un nuevo reto. El último Consejo de Ministros aprobó el Plan de Energías Renovables (PER) 2005-2010. El objetivo del nuevo PER, que sustituye al Plan de Fomento de las Energías Renovables 2000-2010 elaborado en 1999, es lograr que el 12,1% de la energía primaria consumida en España en 2010 y el 30,3% del consumo bruto de electricidad proceda de fuentes renovables. El coste del proyecto asciende, según el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, a 18.197 millones de euros que financiará en un 77,1% las empresas afectadas y un 20% por parte de promotores, esto es, las compañías constructoras y tecnológicas que participen en los proyectos.