FOTOS: M&G Fotoart
Los candidatos al certamen de belleza Míster Puerto del Carmen 2015 salieron este sábado a pasear por la ciudad y posar para la cámara. Dentro del programa de actividades previas al concurso, los jóvenes fueron protagonistas de una sesión de fotos que inmortalizó su recorrido desde el Hotel San Antonio hasta el Hotel Fariones.
Los candidatos conocieron el histórico bar Puerto del Carmen, que está situado en la calle Juan Carlos I y fue abierto por los años 50. Algunas personas mayores del pueblo relataron a los jóvenes los cambios que ha experimentado la localidad en los últimos años. Les explicaron que La Tiñosa contaba con algunos barrios característicos: El Poril, situado a naciente, Cafrecho al poniente, Puerto Escondido y el Varadero y su Casa Roja, que servían y sirven todavía hoy como lugar de encuentro. El varadero constituía entonces la plaza donde se recogía la pesca y recibía el nombre de la Tiñosa. No fue hasta el año 1966 cuando Puerto Del Carmen recibió su nombre actual. Para los jóvenes fue una experiencia "muy enriquecedora", que les permitió "conocer un poco de la historia" a través de sus vecinos.
Los candidatos visitaron también varias tiendas y negocios de Puerto del Carmen. El próximo sábado seguirán con la promoción de actividades en el municipio de Tías, dentro de la previa al concurso, que se celebra el próximo 17 de abril.
Deben tomarse el concurso "como un hobby"
Desde la organización han hecho hincapié en que el concurso "es una experiencia de aprendizaje y de crecimiento" para que los jóvenes "entren en contacto con el mundo de la moda y decidan si quieren dedicarse a ello o no en un futuro". "Más allá de la belleza física, el requisito más importante en un concurso de belleza no es sólo el aspecto físico, los chicos tienen que desenvolverse bien frente a las cámaras y frente al jurado y, para ello, tienen que tener una autoestima alta, ser cultos, inteligentes, cualificados, extrovertidos, fotogénicos y tener una buena preparación física", inciden desde la organización.
"Lo principal es que los jóvenes estén muy centrados en sus estudios para garantizar sus futuros y que el certamen se lo tomen como un simple hobby que les permita cultivar la disciplina, su potencial creativo o la sana competencia. Los jóvenes sólo dedican cuatro horas a la semana al certamen y siempre son los fines de semana, cuando están más liberados de sus estudios", señalan.