La audiencia salvó este jueves por la noche a la lanzaroteña Noemí Merino de ser la segunda expulsada de Gran Hermano 12 + 1. La conejera fue la primera a la que el público decidió salvar y pudo volver junto al resto de sus compañeros. La expulsión se decidió entre Ariadna y Azucena y, finalmente, ésta última tuvo que despedirse de la casa de Guadalix de la Sierra. Azucena fue expulsada con un 71 por ciento de los votos.
Fueron muchos los compañeros, especialmente los chicos, los que se abrazaron a Noemí cuando le vieron entrar en la casa. La lanzaroteña se había salvado de la expulsión y como no podía ser de otra forma los más fuertes abrazos fueron para Alessandro y Hugo, sus máximos apoyos dentro del programa.
Además, parece que la "guerra" de Noemí con las chicas se está apagando. Al menos este jueves Ariadna, antes de enfrentarse a la expulsión, decidió reconciliarse con la lanzaroteña. Mantuvo una charla con ella para aclarar algún malentendido y parece que las dos concursantes llegaron a comprenderse, según la web de Telecinco.
Este jueves también entró en la casa de Gran Hermano el concursante que pujó en Ebay bajo el nombre de Aristidín. Pagó 69.100 euros para poder ser participante de este programa. El dinero será destinado a la Cruz Roja.